El incidente que protagonizaron Sebastian Vettel y Lewis Hamilton en el GP de Azerbaiyán en Baku, cuando el alemán golpeó a propósito al inglés cuando iban tras el safety car, sigue coleando. Este sábado, en Austria, el británico se negó a darle la mano al alemán.

Tras acabar la calificación, el presentador de la emisión oficial de la F1, Davide Valsecchi, quiso que el de Ferrari y el de Mercedes se dieran la mano para así enterrar el hacha de guerra. Pero aunque Vettel se paró y amagó con estrechar la mano de su rival, Hamilton no estaba por labor: se dio media vuelta y se fue.

No obstante, antes de las entrevistas, ambos pilotos sí que se estrecharon la mano.