La escudería McLaren de Fernando Alonso afronta la primera carrera de la temporada, este fin de semana en Australia, con mucha incertidumbre después de una pretemporada repleta de problemas mecánicos.

El director del equipo, Eric Boullier, ha admitido que no se plantean ningún objetivo concreto en Melbourne. "Vamos a encarar la temporada carrera a carrera. Para nosotros Australia será el punto de referencia para entender dónde estamos en relación al resto del pelotón, y lo que debemos hacer para encarar los próximos grandes premios", ha comentado.

El francés también ha asegurado que no se plantean romper su relación con Honda, su proveedor de motores, tal y como se había especulado en las últimas semanas: "No vamos a prometer nada ni hacer pronósticos sobre nuestro rendimiento o resultados, pero McLaren y Honda seguirán trabajando juntos y vamos a maximizar todo lo que tenemos en nuestro paquete".

Boullier reconoce que la pretemporada fue más complicada de lo esperado para la escudería. "No es ningún secreto que en McLaren-Honda tuvimos dos semanas de test más complicadas de lo esperado", dice, aunque añade que han intentado solucionar los problemas desde que terminaron los test.

Hemos trabajado codo con codo desde que volvimos de Barcelona para solucionar los problemas que sufrimos antes de la primera carrera de la temporada", sostiene.

Desde Honda, señalado como el principal culpable de todos los problemas, subrayan que han mejorado el motor de cara a la cita de Melbourne.

Yusuke Hasegawa, director del fabricante japonés, ha explicado las mejoras introducidas: "En cuanto a rendimiento, hay margen de mejora con el mapping, que ofrece mejor manejabilidad, y con un análisis más profundo pudimos realizar más cambios para estar preparados de cara a Melbourne. Sabemos que vamos por el camino indicado y seguiremos trabajando para mejorar nuestra competitividad a lo largo de la temporada".