Una carrera de San Silvestre va más allá de la fecha ideal del 31 de diciembre: es toda una marca que contextualiza bien en unas fechas muy concretas.

La de Salamanca, que ya tiene más de treinta ediciones a sus espaldas, fue una de las carreras ‘sansilvestres’ disputadas durante este fin de semana previo al final del año oficial y su edición de 2014 ha ganado notoriedad por una broma.

La cita helmántica, que coincidía en fecha con el Día de los Inocentes, arrancó con un falso anuncio de control antidoping que provocó que más de un corredor, según informa este lunes La Gaceta de Salamanca, no participaron en la carrera.

El locutor anunció que se realizarían controles antidopaje a los diez primeros de la categoría masculina y a las cinco primeras féminas, además de otros diez participantes elegidos al azar.

“Se trataba de una broma, pero si alguien ha abandonado de verdad por temor a un control, me alegro”, declaraba al rotativo salmantino José Antonio Molinero, máximo responsable de la organización.