Sebastian Vettel y Lewis Hamilton han coincidido este jueves en la rueda de prensa del GP de Austria tras el incidente que protagonizaron ambos en el pasado GP de Azerbaiyán, donde el piloto de Ferrari embistió al de Mercedes de forma deliberada, una maniobra que le costó un 'stop and go' de penalización.

La FIA decidió, además, llamar a declarar a Vettel el pasado lunes para estudiar una posible sanción añadida, aunque finalmente, tras escuchar las disculpas del piloto alemán, decidió cerrar el caso.

Este jueves Vettel ha vuelto a disculparse públicamente en la sala de prensa del circuito Red Bull Ring: "No estoy orgulloso de lo que hice. Cometí un error, pero he pedido perdón", ha comentado.

"Si pudiera cambiar lo que hice, lo haría, pero no puedo. Ponerme a su lado y golpear su neumático fue una decisión incorrecta, pero nunca tuve la intención de hacerle daño. Íbamos a baja velocidad, pero fue peligroso", ha añadido.

Hamilton, por su parte, ha aceptado las disculpas de Vettel y ha apostado por pasar página: "Sebastian y yo hablamos después de la carrera, y también me mandó un mensaje. Por mi parte, seguiré teniendo el máximo respeto por él como piloto y seguiré luchando contra él de la misma forma que hemos estado luchando hasta ahora, no seré menos duro, sino como hasta ahora".

El piloto inglés sí ha querido dejar claro que no realizó ningún 'brake-test' ni frenó excesivamente antes de la retirada del safety-car, tal y como afirmó Vettel el domingo después de la carrera para justificar su reacción. "Los datos de telemetría lo demuestran claramente", ha dicho.

Vettel y Hamilton también han coincidido al asegurar que no les gustaría tener a Fernando Alonso como compañero de equipo la próxima temporada.

"Estoy contento con el compañero que tengo", indicó Hamilton, en referencia a su actual compañero de Mercedes, el finlandés Valtteri Bottas.

"Yo no soy el responsable de firmar a los pilotos, pero si tengo que decir algo, prefiero a Kimi", fue la respuesta de Vettel, también apostando por la continuidad en Ferrari de Kimi Raikkonen.