Los San Antonio Spurs de Pau Gasol recibían en el AT&T Center a los de la bahía de San Francisco para enfrentarse a uno de sus rivales más directos, los Golden State Warriors. Estos equipos no se encontraban en una cancha desde las finales de conferencia del 2017 donde los tejanos fueron arrollados (4-0).

Esta vez la historia no iba a cambiar y los Spurs acabarían perdiendo 112 a 92 a pesar de jugar una primera parte muy sólida. No fue suficiente para derrotar al ‘Big Three’ de Golden State, que en la segunda parte, hicieron su mejor baloncesto anotando 62 puntos.

Klay Thompson con 27 puntos, 5 de 8 en triples, fue el máximo anotador del encuentro y sigue demostrando la buena temporada que está haciendo, en la que promedia 21.7 puntos por partido. Kevin Durant y Stephen Curry acompañaron al escolta con 24 y 21 puntos respectivamente. Además, ambos jugadores aportaron ocho rebotes.

Con esta derrota los Spurs perdieron su cuarto partido consecutivo, lo que confirma que el equipo de Gregg Popovich, que acabo expulsado a falta de 4:47 minutos para el final del tiempo reglamentario, está en una pequeña crisis. La falta de sus dos estrellas Kawhi Leonard y Tony Parker, ambas por lesión, hace que el equipo no tenga tanto nivel ofensivo. Por su parte, LaMarcus Aldridge se salvó de la quema con 24 puntos y 10 rebotes. Kyle Anderson, que sustituía a Kawhai, anotó 16 puntos y el español Pau Gasol consiguió 11 puntos y seis rebotes en 26 minutos de juego anotando 5 de 8 de sus tiros intentados.

Los Warriors, siguen demostrando por qué es el segundo mejor equipo de la liga en porcentaje de triples (41%), por detrás de Orlando Magic (44,2%). Los de San Francisco han anotado al menos 10 triples en cada uno de los encuentros que han disputado esta campaña, 14 de 28 frente a los Spurs. Klay Thompson, por su parte, lleva 63 partidos consecutivos con al menos un triple, la mayor racha actual en la NBA.