La salida de la Verónica varía el ritual del siglo XVII

La pintura se queda en la plaza de Santa María sin peregrinar hasta la reliquia por no incurrir en un error histórico. La pedanía reivindica más mejoras
La tradición de la romería de la Santa Faz permite pocas novedades, pero este año hay una, anecdótica, que varía levemente un ritual que data del siglo xvii: la salida de la Verónica. Aunque esta pintura que representa el personaje bíblico de la mujer que secó el rostro de Jesucristo no llegará en peregrinación hasta el encuentro con la reliquia de la Santa Faz, como estaba previsto inicialmente, sí que saldrá de la iglesia de Santa María y permanecerá simbólicamente en la plaza.

El titular de este templo, Antonio Vivó, y el capellán de Santa Faz, Elías Juan Ibáñez, han acordado este movimiento para no incurrir en un error histórico. Y aparte de esta innovación, la celebración de la romería se ha preparado este año sin que falten los detalles habituales, con los puestos de venta de recuerdos del día y los feriantes. Hay mucho color.

Con todo, el alcalde pedáneo, Miguel Payá, espera que el Ayuntamiento cumpla su promesa de pintar todas las fachadas de Santa Faz, lo que sin duda daría más color a la romería.

Un feriante con 40 años de historia

Juan Valls Montaner hace 40 años que monta su atracción en Santa Faz, aunque no abundan los veteranos como él. «Todo sea por no perder la tradición, se han ido muchos feriantes y otros están de camioneros», observa. La falta de solares y el euro tienen la culpa.

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