Don Winslow, el autor de El poder del perro, presenta ahora su novela Salvajes, protagonizada por la guerra contra el narcotráfico. Asegura que no cree en un mundo sin violencia porque los humnoas somos "una especie violenta" por naturaleza.

Ha cambiado usted el tono, el lenguaje incluso, en esta novela, ¿por qué?

El lenguaje está siempre evolucionando, y como los medios de comunicación aceleran, la evolución acelera con ellos. Estamos viendo nuevas formas de comunicación, nuevas formas de hablar, nuevas formas de obtener y transmitir información. Yo quería que mi escritura reflejara eso, que fuera al mismo ritmo.

¿Siempre le ha preocupado tanto el tráfico de drogas y la guerra entre narcos? ¿Cuándo nació este interés?

Fui consciente de la situación de la droga alrededor del año 2000, cuando la violencia en México comenzó a aumentar. Hubo una masacre de diecinueve hombres, mujeres y niños inocentes en una ciudad adonde nosotros solíamos ir para pasar fines de semana baratos. Me pregunté a mí mismo por qué, comencé a investigar y descubrí una rica y preocupante historia para el comercio de narcóticos. Cuanto más sabía, más me enfadaba.

¿Cuál cree que sería la solución ideal para terminar definitivamente con la droga?

Bueno, la solución ideal sería que la gente parara de consumir drogas. No comprador, no vendedor.

¿Y la solución realista?

Legalización o, al menos, despenalización. El modelo delictivo simplemente no funciona; mucho menos, el modelo militar. Nosotros simplemente hacemos ricos a los asesinos. Es la prohibición la que produce el beneficio. Los costes sociales son enormes.

¿Se inspiró para este libro en algún hecho real?

En un buen número de acontecimientos reales, y vi un videoclip de cabezas decapitadas que inspiraron el libro. Pero en un sentido más amplio, el fondo es el movimiento de retorno de los cárteles mexicanos al mercado de la marihuana y su establecimiento de organizaciones en Estados Unidos.

En sus libros hay mucha violencia, ¿hay manera de contrarrestarla?

Mientras haya beneficios por matar, la gente matará. Mientras la violencia impere, los más violentos llegarán a la cumbre. Tenemos que eliminar los beneficios del comercio de narcóticos.

¿Es posible creer en un mundo sin violencia?

Es posible, supongo, pero yo no lo creo. Somos una especie violenta. Quizá evolucionaremos, pero la historia moderna indica lo opuesto.

El aclamado Winslow (Nueva York, 1953) verá su Salvajes en el cine en 2012 y dirigida por Oliver Stone.