Comienza la reunión para el acuerdo laboral de Sniace con la confianza de la mayoría del comité en que se suscriba hoy

La reunión en el ORECLA de Santander para la firma del acuerdo laboral de Sniace ha comenzado ya con la expectativa del secretario del comité de empresa, Antonio Pérez Portilla, de que no haya "ningún problema" para suscribirlo a pesar de que no cuente con la unanimidad de los sindicatos por el rechazo anunciado por USO.

La reunión en el ORECLA de Santander para la firma del acuerdo laboral de Sniace ha comenzado ya con la expectativa del secretario del comité de empresa, Antonio Pérez Portilla, de que no haya "ningún problema" para suscribirlo a pesar de que no cuente con la unanimidad de los sindicatos por el rechazo anunciado por USO.

En declaraciones a los medios de comunicación, y dado que la empresa les ha convocado a esta reunión, Pérez Portilla entiende que los administradores concursales han dado el visto bueno a que se modifique el acuerdo para que no se necesite la unanimidad del comité.

Las partes se han reunido a la hora indicada sobre las 13.00 horas con la presencia de todos los sindicatos (UGT, CC.OO, Sindicato Unitario y USO), incluida USO que en principio no firmará, y, de los representantes de la Dirección de Sniace, entre ellos, su presidente, Blas Mezquita.

Ha sido en la misma reunión donde se está adaptando el acuerdo a la no existencia de unanimidad por parte del comité, lo que está retrasando la firma, según explican algunos de los representantes de los trabajadores participantes en la reunión.

El primero en subir hacia el ORECLA, ubicado en el Pasaje de Peña de Santander, ha sido el sindicato USO y, ya, sobre las 12.50 han subido el resto de miembros del comité, animados con aplausos y con gritos de ¡'A por ellos!'.

Mezquita, que no ha querido realizar declaraciones previas a la reunión, y otros miembros de la Dirección han llegado cuando apenas faltaban unos minutos para la reunión.

El secretario del comité de empresa ha asegurado que la firma de este preacuerdo es un "paso importante", "clave" y la "piedra angular" de un procedimiento en el que, aún quedan algunos "temas importantes de enjundia" por resolver.

Entre ellos, ha citado la necesidad de que se retrotraigan los despidos del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que recibió el visto bueno de la Audiencia Nacional; la presentación del plan de viabilidad y el visto bueno de los acreedores.

A preguntas de los medios sobre el inversor que podría haber encontrado Sniace, Pérez Portilla ha opinado que su identidad no se conocerá hasta después de la Junta de Acreedores.

Sin embargo, Pérez Portilla sí cree que existe un inversor dado que, de lo contrario, a su juicio, no se firmaría el preacuerdo.

Respecto al coste previsto, Pérez Portilla ha recordado que el plan laboral tiene un coste de unos 12 millones de euros, a los que habría que sumar otros 10 más en inversiones para arrancar la planta. El pasado 22 de septiembre, Sniace y comité llegaron a un acuerdo laboral para reabrir la fábrica de Torrelavega y reanudar su actividad con 326 trabajadores.

El resto de la plantilla hasta llegar a los 533 operarios que la conforman optarían por la jubilación y prejubilación o se acogerá a la indemnización.

El acuerdo que se alcanzó el día 22 contemplaba jubilaciones de 58 a 63 años, una bolsa de trabajo para contratar a todos los operarios con contrato relevo, u 800 euros de ayuda para quienes dejen de percibir prestación por desempleo una vez entre en vigor el plan laboral.

Así, 72 trabajadores se jubilan, 60 se acogen a las jubilaciones anticipadas y 33 optan por las indemnizaciones.

Además, para la veintena de empleados que tenían contrato relevo se ha creado una bolsa de trabajo y la empresa se ha comprometido a contratarlos a todos en un plazo aproximado de un año, y en todo caso siempre "antes que a uno de la calle".

El acuerdo contempla un convenio a seis años. En los dos primeros ejercicios (2015 y 2016) habrá congelación salarial, mientras que en el tercero se aplicará una subida del IPC + 0,5%, que se mantendrá en 2018. Al año siguiente se sumará la misma subida, y en el último ejercicio, 2020, también, además de una reducción de la jornada laboral de 8 horas.

El acuerdo, que prevé una bajada salarial del 15% para los trabajadores que quedan, fue ratificado por los trabajadores el 24 de septiembre.

Sin embargo, días después USO señaló que no firmaría el acuerdo en los términos actuales porque, según dijo, no está dispuesto a otorgar "cheques en blanco".

Así, USO exigió a la Dirección de Sniace que presente, de forma "inmediata" y por escrito, un plan industrial, la financiación de ese plan industrial y del plan laboral, y la fecha concreta de inicio de la actividad industrial.

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