Las excentricidades y el comportamiento poco apropiado parecen ser el día a día del joven cantante canadiense Justin Bieber, que a problemas con la policía y la justicia suma algunas actitudes poco amables, como ocurrió este miércoles en su visita a Madrid.

El artista tenía pactada dos entrevistas en la sede del grupo Prisa en la Gran Vía de Madrid, una de ellas, la primera, en Los 40 Principales, en el espacio yu: No te pierdas nada, que presentan Dani Mateo y Antonio Castelo.

Bieber se presentó en los estudios y comenzó la entrevista, pero a los ocho minutos aseguró que tenía que ir al baño, según informa la Cadena Ser. Tras pasar por el aseo, que su equipo de seguridad desalojó para que pudiera usarlo solo, fumó en una sala del edificio, algo prohibido, y se marchó, dejando a medias la entrevista e incumpliendo el compromiso que tenía de cantar y ser entrevistado después también para los 40 Principales, en ese caso por Tony Aguilar y Xavi Martínez.

El cantante tenía por la noche una cita en El Hormiguero, de Antena 3, al que acudió ataviado con gorro de lana y capucha, a pesar del calor que hace en cualquier estudio de televisión. En el divertido espacio, al que acudía por cuarta vez, se mostró apático y serio y ni siquiera el hecho de que sus fans, que llenaban el graderío, cantaran sus canciones pareció ser suficiente para que sonriera o se diera la vuelta para mirarlas.

Respondió con algo muy parecido a la desgana a las preguntas de Pablo Motos y en ocasiones ni su propia música lograba que mostrara algo de interés. Tan sólo en la segunda mitad del espacio pareció recobrar algo de un ánimo que pareció faltarle en su visita a España.