El 24 de mayo de 2015, hace ahora un año, cambiaba el panorama político en las grandes ciudades españolas. Las elecciones municipales de aquel día abrieron la puerta a nuevos alcaldes y, en muchos de los casos, a partidos emergentes que nunca habían tenido poder municipal. El 13 de junio tomaron posesión los primeros ediles.A los líderes de formaciones emergentes se les llamó ‘alcaldes del cambio’: Manuela Carmena en Madrid, Ada Colau en Barcelona, Joan Ribó en Valencia y Pedro Santisteve en Zaragoza. También Sevilla cambió de manos, con la pérdida de la mayoría del PP, que posibilitó la llegada de Juan Espadas (PSOE). Su gestión ha sido escrutada con lupa durante este año. Entre sus logros están los avances en materia social o las nuevas medidas de movilidad. En cambio, les han llovido críticas por el exceso en su política de gestos para romper con el pasado, por la paralización de proyectos urbanísticos o por los retrasos en cumplir con lo prometido.

Luces:

* Nuevo protocolo de contaminación. El Ayuntamiento ha elaborado un nuevo protocolo de contaminación más restrictivo que el anterior, aprobado por el PP en marzo de 2015. El nuevo texto baja los umbrales y toma medidas antes de que alcance el límite máximo permitido de dióxido de nitrógeno (N02). Además, los madrileños disponen ahora de un día para planificar su operativo de movilidad desde el aviso de activación.

*Fondos buitre y vivienda social. El Gobierno municipal ha paralizado la venta de 2.086 viviendas de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVS) a fondos de inversión inmobiliarios, una operación prevista por la anterior corporación municipal del PP. Además, ha anunciado la construcción de casi 4.000 pisos sociales en la legislatura.

* Políticas sociales. El Ayuntamiento ha avanzado mucho en materia social, aumentando el gasto para este año en un 24%. Hay más presupuesto para comedores escolares, ayuda a domicilio y asistencia a mayores, entre otros.

* Limpieza. La mejora de la limpieza viaria ha sido uno de los empeños del Gobierno municipal. Las medidas de paralización de los ERTES (posteriormente han sido retirados) y las limpiezas integrales por zonas no tuvieron un gran de impacto inicialmente: Madrid seguía igual de sucio, como reconoció la propia alcaldesa tras el periodo navideño. Sin embargo, a día de hoy, los indicadores de limpieza señalan que la situación ha mejorado. Según datos municipales, las quejas y reclamaciones vecinales han pasado de 655 en julio de 2015 a 140 en abril de 2017. Lo mismo ha ocurrido con los avisos: de 7.036 en julio de 2015 a 1.942 en abril de este año.

* Regeneración urbana. El Ayuntamiento ha destinado este año 138 millones de euros a la rehabilitación y mejora energética de viviendas, ya que el 70% del 1,5 millones de viviendas que tiene la capital son anteriores a 1980.

Sombras:

* Memoria Histórica. Los errores en la gestión de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica (2007) provocaron la retirada de placas que no eran objeto de la misma. Como consecuencia de ello, el Ayuntamiento se vio obligada a apartar del asunto a la delegada de Cultura, Celia Mayer, y crear un Comisionado de Memoria Histórica.

* Paralización de proyectos. Pese a que el plan para el Edificio España saldrán finalmente adelante, hay otros proyectos urbanísticos que se encuentran paralizados y sin visos de avanzar como la ‘Operación Chamartín, la ‘Operación Calderón’ o Campamento

* Atascos. El problema de los atascos sigue sin solucionarse pese a que el Consistorio ordenó a la Policía Municipal realizar labores de tráfico en las horas punta.

* Títeres. La programación de una obra de títeres en Tetuán con motivo del Carnaval acabó con la detención de los titiriteros por enaltecimiento del terrorismo. En la representación, anunciada inicialmente para niños, las marionetas simulaban una violación, el ahorcamiento de un juez y durante unos segundos aparecía una pancarta con el lema ‘Gora Alka-ETA’. Esto supuso la destitución del director artístico responsable de la programación, pero no la de la máxima responsable del área de Cultura, Celia Mayer.

* Policía. La Policía Municipal ha estrenado una nueva estructura en la que se ha apostado por descentralizar las unidades de distrito y ser más cercanos al ciudadano. Sin embargo, los medios con los que cuenta el Ayuntamiento siguen siendo escasos si tenemos en cuenta que en los últimos cinco año se han perdido casi 800 agentes (ahora hay unos 6.200) y que la actual plantilla está bastante envejecida (la edad media es de 47 años).

* Cabalgata de Reyes. El Ayuntamiento convirtió la tradicional cabalgata del 5 de enero en un espectáculo con música de discoteca y con una estética en carrozas y Reyes Magos que nada tenía que ver con lo que es habitual en este desfile navideño.

Luces:

* Aprobación de presupuestos. Ada Colau cerró los primeros presupuestos de su mandato gracias al apoyo del PSC, ERC y finalmente la abstención de la CUP que en abril le negó el apoyo y obligó a retrasar el pleno de presupuestos. La modificación de presupuestaria supone un balón de oxígeno de 275 millones de euros para el ayuntamiento.

* Plan de barrios. Es el proyecto estrella de Colau esta legislatura. El gobierno municipal prevé una inversión de 150 millones de euros en aquellos barrios donde la crisis económica se ha cebado y la desigualdad es más acusada. El Plan de barrios empezará en el Eix Besòs en tres de los barrios con mayor índice de paro, fracaso escolar y pobreza de la ciudad: Trinitat Nova, el Bon Pastor, Baró de Viver i Besòs-Maresme.

* Acuerdo de gobierno con el PSC. Colau cerró la semana pasada el acuerdo de gobierno con los socialistas de Jaume Collboni. Este pacto de gobierno le permite a Colau pasar de los 11 regidores de BComú a los 15 sumando los 4 del PSC, pero aún está lejos de la mayoría que en Barcelona está en los 21 regidores. Por ello, Colau quiere sumar a ERC y a la CUP para conseguir un gobierno de izquierdas en Barcelona. La CUP ya ha dicho que no y ERC insiste en que no quiere gobernar con el PSC (aunque tradicionalmente ERC ha gobernado con el PSC en el ayuntamiento y actualmente comparten gobierno en el Área Metropolitana de Barcelona).

Sombras:

* Los trabajadores del metro en lucha: Aunque parece que está a punto de cerrarse un preacuerdo con los trabajadores del metro de Barcelona, las peticiones laborales de este colectivo han marcado duramente los primeros meses del gobierno de Ada Colau. Los trabajadores del metro han convocado paros para pedir mejoras laborales en fechas señaladas para incrementar la presión: durante el Mobile World Congress y Alimentaria, o el clásico Barça-Real Madrid. Ada Colau intentó cerrar el conflicto laboral acudiendo en persona a una de las reuniones sin obtener resultado. En ese momento, la dirección de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) filtró los sueldos de altos cargos y trabajadores del metro, lo que encendió todavía más los ánimos.

* La Guardia Urbana en contra: El cuerpo de la Guardia Urbana está molesto por la actitud del gobierno de Colau que consideran no defiende suficientemente a la policía municipal de Barcelona y en cambio está a favor de los manteros. El último episodio se ha producido esta semana pasada cuando un mantero agredió a un agente de la Guardia Urbana en la cabeza. El tercer teniente de alcalde, Jaume Asens, se puso en contacto con la abogada del Guardia Urbana para que no presente denuncia contra el mantero. Hoy la Guardia Urbana ha pedido a Colau que se posicione a favor del cuerpo policial de Barcelona.

* Cobertura de la Ronda de Dalt: El gobierno de Colau preferiere no hacer inversiones extraordinarias en grandes obras, concretamente 400 millones de euros para soterrar 5,5 kilómetros de vía. Así rechaza el plan de cobertura de la Ronda de Dalt que fue un compromiso del anterior gobierno de Xavier Trias (CiU) con los vecinos que ya han mostrado su enfado por la negativa de Colau de cubrir la ronda.

Luces:

* Movilidad. El nuevo equipo de Gobierno liderado por Joan Ribó ha hecho de las políticas de movilidad una de sus banderas durante este primer año. La peatonalización del entorno de la Lonja, de Serranos, la licitación del anillo ciclista del centro y el rediseño de líneas de la EMT son los principales ejemplos.

* Equilibrio económico. El Consistorio cerró el ejercicio 2015 con un superávit de 61 millones de euros y ha logrado reducir la deuda hasta los 714 millones de euros, una cifra que prevé rebajar todavía más hasta finales de año, para dejarla en 700 millones.

* Contratación de personal. El Ayuntamiento de Valencia tiene previsto realizar este año alrededor de 200 contrataciones, lo que supondrá la primera incorporación de trabajadores al Consistorio en cinco años. El cuerpo más necesitado de nuevas plazas es el de la Policía Local, aunque también hacen falta economistas.

* Feria Valencia. El Consell, el Ayuntamiento de Valencia y Feria Valencia acordaron el pasado mes de mayo la hoja de ruta para desbloquear y reconvertir la entidad, cuya sede se asienta en terrenos municipales. La Generalitat asumirá los 510 millones de euros de deuda que arrastra Feria Valencia y, de cara al futuro, socios tecnológicos se integrarán en una sociedad mixta con mayoría de capital privado y con una presencia del 40% del Consistorio y de la Generalitat.

* Parking de Brujas. El Ayuntamiento de Valencia ha asumido el coste de las obras del aparcamiento de la plaza de Ciudad de Brujas, una infraestructura emblemática y demanda por vecinos y comerciantes del Mercado Central, por un total de 11,3 millones de euros, tras la firma de un convenio entre el Consistorio. La administración local asumirá este pago de manera "plurianual", por 1,13 millones al año más intereses.

Sombras:

* Aperturas del gran comercio en festivos. La polémica por la apertura en festivos de los centros comerciales sigue sin resolverse. El Gobierno Local pactó con las grandes superficies la reducción de cinco a dos zonas de gran afluencia turística. Sin embargo, un error en la tramitación ha supuesto la nulidad por parte de la Conselleria de Economía, lo que ha obligado a reiniciar el proceso.

* Lentitud en El Cabanyal. La anulación de la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez hacia el mar, que incluía el derribo de 1.000 viviendas en El Cabanyal, despejó el futuro del barrio. Sin embargo, casi un año después, entidades vecinales reclaman celeridad en la rehabilitación y revitalización del entorno, muy degradado tras años de abandono.

* Falta de información en peatonalizaciones. El cierre al tráfico del entorno de la Lonja y de parte del barrio del Carmen no ha venido precedido de amplias campañas de información a residentes y comerciantes. En ambos casos, se anunciaron poco antes de su puesta en funcionamiento, lo que en ocasiones ha sembrado el desconcierto entre parte de los afectados.

* Molestias por ruido y botellón. La asignatura pendiente del Ayuntamiento sigue siendo conjugar el derecho al descanso con el ocio, sobre todo en lo que se refiere a la contaminación acústica que provocan los casales falleros, las verbenas y el botellón. La Concejalía de Protección Ciudadana quiere activar la figura del mediador vecinal, pero de momento siguen llegando quejas al Síndic de Greuges por elevados niveles acústicos a altas horas de la madrugada.

* Gastos de representación. El PP ha denunciado a Joan Ribó por lo mismo que este llevó a la Fiscalía el llamado caso Ritaleaks, por el abono de facturas de supuestos gastos personales a cuenta del Ayuntamiento, en este caso de un viaje del alcalde y varios asesores a La Coruña por un importe total de 7.200 euros. El Ayuntamiento sostiene que acudieron fruto de una invitación oficial, pero la oposición cree que fue a un acto de carácter electoral. Ribó dijo que dimitirá el juez decide su imputación.

Luces:

* Muchas propuestas sobre la mesa. Juan Espadas se ha comprometido a la puesta en marcha de numerosos proyectos para la ciudad, como el del Polígono Sur y el Vacie, la recuperación de una televisión municipal, la regeneración del río y el paseo fluvial, puesta en valor de proyectos históricamente atascados (Altadis, la Gavidia, Tablada…).

* Presupuestos. Pese a la inicial oposición del resto de partidos, Espadas ha conseguido aprobar sus primeros presupuestos con el apoyo de Ciudadanos y de IU, unas cuentas que el socialista califica como “muy sociales”.

* Movilidad. En su primer año como alcalde, Espadas ha concretado la conexión Blas Infante-Cartuja mediante un bus rápido (que estará en marcha después del verano), el bonobús social para trabajadores con rentas bajas (a partir de junio), la ampliación del horario de las líneas nocturnas, una nueva rotonda de acceso a la Cartuja por la Torre Pelli, un nuevo cambio de sentido en la calle Torneo, arranque tras el verano del plan de la bicicleta en el centro, obras de la oficina de la bicicleta…

* Empleo. El regidor socialista ha aprobado un plan de empleo a través de un contrato de mantenimiento de parques y jardines, con el que el PSOE espera general más de 315 puestos, siendo más de un centenar nuevos.

* Colaboración con otras ciudades: Tras años de enfrentamientos, por fin ha echado a andar el eje Sevilla-Málaga, al que posteriormente se han unido Granada y Córdoba, para avanzar juntas especialmente en el ámbito del turismo.

Sombras:

* Poca concreción. Precisamente su primer acierto es, a la vez, su primer error. Espadas planteó sobre el papel muchos proyectos, pero prácticamente ninguno se ha concretado un año después. Este es el principal motivo por el que, a día de hoy, tiene en contra a toda la oposición, incluso a la que le apoyó para la investidura.

* Zona azul. Derogar la zona azul fue una de las grandes promesas electorales de Espadas. El regidor abordó el tema recién entrado en la Alcaldía, pero finalmente no ha podido derogarla. Espadas asegura que jurídicamente no le ha sido posible y lo único que ha llevado a cabo ha sido una reducción de las plazas de zona azul.

* Catastrazo. El Gobierno central ha revisado los valores catastrales de Sevilla un 10% al alza, si bien el equipo de Espadas asegura que esa subida ha sido compensada con la revisión de los coeficientes, de manera que ha cumplido su promesa de no subir el IBI. Espadas afirma además que la petición de la revisión catastral fue realizada por el anterior equipo de Gobierno del PP, pero con petición de que se realizara en el segundo semestre de 2015.

* Semana Santa y Feria. Polémicas en las dos fiestas más importantes de la ciudad. El plan de seguridad de Semana Santa incluyó la colocación de vallas en puntos estratégicos de la ciudad, que mantenían al público más alejado de los pasos, medida que fue duramente criticada por una parte importante de la ciudadanía. En cuanto a la Feria, Espadas ha convocado para septiembre la primera consulta ciudadana, para que los sevillanos elijan si quieren que la Feria dure oficialmente de sábado a sábado.

* Paro y vivienda. Dos de los principales problemas de la ciudad que, de momento, no han sido tratados en profundidad por el nuevo Ayuntamiento. De nuevo, hay medidas sobre el papel, pero no en la práctica.

Luces:

* Freno a los desahucios. Ese fue su principal objetivo nada más llegar a la alcaldía. Un año después, Santisteve ha logrado paralizar todos los desalojos de los que el Ayuntamiento o las plataformas antidesahucios han tenido constancia. Pero no puede decir que Zaragoza sea una ciudad libre de desahucio, ya que una parte de los afectados no acuden a los servicios sociales a estas plataformas.

* Programa de captación de vivienda para alquiler social.Tras aprobarlo en diciembre, el Ayuntamineto acaba de poner en marcha un programa por el que esperan captar, a través de incentivos económicos y fiscales, 1.300 vacías en los próximos cuatro año. El objetivo es destinarlas a personas en necesidad habitacional o en situación de vulnerabilidad. A ello se dedicarán 1.100.000 euros.

* Políticas sociales. Atajar la emergencia social era una de sus prioridades. De mayo del año pasado a la actualidad, se han concedido 30.000 ayudas de urgente necesidad. Aunque no sea competencia directa del Ayuntamiento, sino del Gobierno autonómico, se ha asumido mediante una encomienda de gestión la atención a dependientes de grado 1 (servicio de ayuda a domicilio). En cuanto a la crisis de los refugiados, hay una partida de 200.000 euros, además de cuatro pisos y un acuerdo con Accem para que cuando lleguen tengan garantizadas sus necesidades de vivienda, sociales, educacionales y sociosanitarias.

Sombras:

* Escándalo de la gomina. Es uno de los episodios más desagradables que ha vivido desde que llegó al cargo. En febrero se le acusó de cargar a las arcas del Ayuntamiento 15,90 euros de un bote de gomina y los gastos de algo más de 900 euros de un viaje a Galicia, con tres de sus asesores, para participar en un encuentro con miembros de Podemos, de la Marea Atlántica y de Barcelona en Comú. La polémica lo tuvo varios días en el punto de mira, y toda la oposición, incluido PSOE y la Chunta, apoyó en el pleno municipal la moción presentada por el PP en la que solicitaba al alcalde la devolución de ese dinero. Él alegó que se trataba de un viaje para un "acto institucional", y respecto a la gomina, dijo que sus jornadas laborales son muy largas y necesita productos de aseo en su despacho por si tiene que estar "presentable y decente".

* Huelga de autobuses urbanos. Ha sido, sin duda, su momento más complicado al frente del Consistorio. La falta de acuerdo en la negociación del acuerdo colectivo entre los trabajadores y la empresa Auzsa llevó a una huelga indefinida que duró cuatro meses y medio, la más larga e la historia. Santiesteve tuvo que afrontar acusaciones de falta de neutralidad, que él nego, así como una gran crispación y hartazgo entre los ciudadanos a consecuencias de los paros. Sufrió mucho desgaste.

* Polémica de las banderas. El gusto del alcalde de Zaragoza por colocar banderas en el balcón consistorial también le ha traído algún dolor de cabeza. Primero fue la colocación de la enseña griega como muestra de “apoyo al pueblo" de ese país, a la que siguieron la de Francia, tras los atentados de París, la de la República Árabe Saharaui Democrática, la del orgullo gay y la republicana, el pasado 14 de abril. La confrontación y los reproches de la oposición llegaron el Pleno, donde, a propuesta del PP, se aprobó una moción (con los votos a favor de populares y Ciudadanos y la abstención del PSOE) para que el alcalde lamentara “la política espectáculo del Gobierno de la ciudad".

Información elaborada por: Francisco Pelayo (Madrid), Isabel Serrano (Barcelona), José Luis Obrador (Valencia), Beatriz Rodríguez (Sevilla) y Victoria Luna (Zaragoza)