Los acusados por las 'tarjetas black' intentan anular la prueba central en el primer día de juicio

Vista general de la sala del juicio contra los expresidentes de Caja Madrid Miguel Blesa (d) y Rodrigo Rato (2-d), y otros 63 usuarios de las polémicas tarjetas black, entre ellos el expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán (3-d).
Vista general de la sala del juicio contra los expresidentes de Caja Madrid Miguel Blesa (d) y Rodrigo Rato (2-d), y otros 63 usuarios de las polémicas tarjetas black, entre ellos el expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán (3-d).
Sergio Barrenechea / EFE
Vista general de la sala del juicio contra los expresidentes de Caja Madrid Miguel Blesa (d) y Rodrigo Rato (2-d), y otros 63 usuarios de las polémicas tarjetas black, entre ellos el expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán (3-d).

El apretón de manos entre el procesado Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, y el reo Gerardo Díaz Ferrán, encarcelado por el 'caso Marsans', durante el receso de la primera jornada del juicio de las 'tarjetas black' ilustró este lunes la estrategia adoptada por las defensas de los 65 acusados para intentar tumbar el proceso antes de su comienzo formal.

El tribunal de la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presidido por Ángela Murillo, fue testigo de como los letrados de los políticos, empresarios y sindicalistas procesados se adhirieron, uno a uno, a las peticiones presentadas por los abogados de Miguel Blesa, Rodrigo Rato, José Antonio Moral Santín (IU) y Estanislao Rodríguez Ponga (PP) para solicitar la expulsión del proceso de Bankia, su matriz BFA y del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que ostentan la acusación principal, y para conseguir la desestimación de su prueba principal: la hoja de cálculo que recoge cuándo y dónde gastó su tarjeta cada consejero.

Según los letrados, ni el Estado ni la entidad bancaria están legitimados para presentarse como perjudicados, ya que el primero aún no había desembolsado el rescate de Bankia en el momento de los hechos (entre 2003 y 2010) y la segunda era una empresa independiente y distinta de la caja de ahorros.

La hoja de gastos incurriría, a su vez, en falta de veracidad por incurrir en la "pura invención" a la hora de cuadrar los importes (Bankia no pudo facilitar el desglose de algunos meses) y carecer de respaldo documental en las boletas o fichas que permiten comprobar la veracidad de los gastos -Bankia no las ha incorporado a la causa-, como argumentó Cristobal Cantero, representante de Gonzalo Martín Pascual (UGT) y José María Arteta (PSOE). "Parece una chapuza hecha por un mero colegial", sentenció Carlos Pardo, letrado de Díaz Ferrán.

Hechas para "comprar voluntades"

El de este lunes fue el segundo intento de vaciar de contenido el juicio antes de su comienzo. El juez Fernando Andreu ya desestimó las peticiones de las defensas durante la fase de instrucción, alegando que las 'tarjetas black' son un apéndice de un caso mayor, el del hundimiento de Caja Madrid y el posterior rescate de Bankia, heredera de la primera.

Este motivo le llevó a rechazar el argumento, repetido hoy por los acusados, de que Caja Madrid habría incurrido en una violación de la Ley Orgánica de Protección de Datos al entregar a Bankia los datos de las compras realizadas por sus consejeros.

El magistrado tampoco contempló la posibilidad de atribuir la creación de los plásticos opacos a Jaime Terceiro, antecesor de Blesa y que dirigió la caja entre 1988 y 1996. De acuerdo a su auto de apertura de juicio oral, no fue Terceiro, sino Blesa y su mano derecha, el director financiero Ildefonso Sánchez Barcoj, quienes "multiplicaron" y "desnaturalizaron" las funciones originales de las tarjetas -gastos de representación- hasta convertirlas en en un medio para "comprar voluntades" entre los consejeros, que dispusieron de ellas pese a ser "perfectamente conscientes" de su origen "ilegítimo".

El caso se destapó gracias a una auditoría interna del Bankia, aunque su divulgación pública tuvo lugar mediante la filtración de información que una fuente anónima hizo a la Comisión Anticorrupción del Partido X, del que formaban parte los colectivos Xnet y 15MpaRato.

Blesa devuelve 436.688 €

El tribunal resolverá las peticiones en los próximos días, antes de concluir la fase de cuestiones previas y de oír a los acusados. El turno de declaraciones comenzará el martes 4 de octubre. La sentencia podría estar lista a principios de diciembre, siempre que se cumpla el calendario establecido.

La Fiscalía propone penas de entre 1 y 6 años de cárcel para los acusados por los delitos de apropiación indebida y administración desleal, además de indemnizaciones cuya cuantía varía en función de las cantidades que gastaron y de si han procedido a su reintegro.

Miguel Blesa, que llegó a las instalaciones de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares entre abucheos e insultos de afectados por las participaciones preferentes, presentó este lunes ante el tribunal los justificantes de devolución de los 436.688 € que se le atribuyen.

Rodrigo Rato, Ildefonso Sánchez Barcoj, el director general Matías Amat, el responsable de la Fundación Caja Madrid y ex jefe de la Casa del Rey Rafael Spottorno, el político del PP José Manuel Fernández Norniella o el empresario Arturo Fernández han cumplido -en todo o en parte- con el mismo trámite a fin de rebajar sus condenas.

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