Más vasectomías que ligaduras de trompas, así evoluciona la anticoncepción en España

  • En diez años ha dado un vuelco la relación entre los dos anticonceptivos definitivos.
  • Si en 2004 eran mayoritarias las ligaduras de trompas (56,6%), en 2014 esta proporción corresponde a las vasectomías (54%).
  • Las ligaduras son el tercer anticonceptivo por volumen de uso en España, aunque a gran distancia de preservativo y píldora.
  • "El aumento de las vasectomías supone una mayor implicación de los hombres en la salud sexual y reproductiva", dice la Sociedad Española de Anticoncepción.
  • BLOG: ¿Es la vasectomía el mejor método anticonceptivo en una pareja?
Una pareja de la mano.
Una pareja de la mano.
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Una pareja de la mano.

Hayan tenido o no descendencia, cuando una pareja da por cerrado este capítulo de sus vidas lo que toca es decidir quién de los dos 'se corta la coleta'. ¿Él? ¿Ella? Últimamente, la respuesta más habitual en España es él. Los hombres están recurriendo más a la anticoncepción vía vasectomía que las mujeres a la ligadura de trompas. Esto supone un cambio de tendencia respecto a décadas atrás, y sitúa a España en el reducido grupo de países del mundo en que ellos se esterilizan más que ellas, aunque los dos métodos estén perdiendo fuerza como anticonceptivo.

La estadística más actual que maneja el Ministerio de Sanidad, correspondiente a los procedimientos de anticoncepción definitivos llevados a cabo en hospitales del Sistema Nacional de Salud hasta 2014, constata el vuelco en la relación entre vasectomías y ligaduras de trompas en diez años. Si en el 2004 fueron 17.671 las mujeres que se sometieron a un procedimiento de ligadura de trompas por 13.574 hombres que optaron por la vasectomía, en 2014 fueron 14.797 las mujeres que se esterilizaron, por 17.357 hombres.

El peso de los hombres en  intervenciones quirúgicas de anticoncepción ha pasado de representar el 43,4%  al 54%. Mientras, las mujeres han recorrido el camino inverso: de suponer el 56,6% de las intervenciones a ser el 46%.

Los profesionales de la Sociedad Española de Anticoncepción, la SEC, vinculan el incremento de las vasectomías a un cambio de actitud de los hombres respecto de la salud reproductivo-sexual. "La vasectomía es el tercer método anticonceptivo por volumen de uso después del preservativo y la píldora, aunque a gran distancia", explica el doctor Modesto Rey Novoa, portavoz de esta sociedad médica, para quién "el incremento de las vasectomías tiene que ver con una mayor implicación del varón en la responsabilidad de evitar embarazos no deseados".

Echando la vista atrás, este ginecólogo explica que "cuando en España se legalizaron los métodos quirúrgicos anticonceptivos, las vasectomías estaban a larga distancia detrás de las ligaduras, pero año a año se han ido equiparando, sin duda, por una mayor implicación del varón".

La socióloga del CSIC Teresa Castro, analizando los datos del Ministerio de Sanidad a los que ha accedido 20minutos, concluye que es un cambio de tendencia "que sorprende porque en todas las encuestas desde 1977 a 1999 predominaban las esterilizaciones femeninas y ahora son las masculinas". Castro considera también que "los hombres están cogiendo más responsabilidad en la anticoncepción". Para esta socióloga, "es una evolución lógica, por cuanto desde el punto de vista médico es un proceso más sencillo y refleja una buena tendencia en igualdad de género".

Las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud atestiguan que en los países desarrollados la tendencia es la que vive España, más vasectomías que ligaduras. Por el contrario, en la mayoría de los países en desarrollo todavía la esterilización es considerada exclusiva de las mujeres.

Desde el punto de vista médico, los expertos en contracepción explican que ambas técnicas, vasectomías y ligaduras, pueden ser reversibles, aunque las vasectomías resultan más fáciles y "sin que de ello se pueda inferir que los resultados vayan a ser siempre plenamente satisfactorios", puntualiza Rey Novoa. Este doctor reconoce que en los últimos años se ha producido un incremento de las peticiones de reversión de ambas técnicas, mayor también entre los hombres, "principalmente ligado al fenómeno de personas que acceden a una segunda o tercera pareja estable con la que desean tener hijos, cuando con la anterior habían cerrado ese ciclo".

Más vasectomías y ligaduras en los años de la crisis

Los datos del Ministerio de Sanidad permiten observar cómo la demanda de ambos métodos de esterilización, vasectomías y ligaduras, lleva unos años a la baja. Después de una época de incremento, con máximos entre los años 2008 y 2010: cuando llegaron a sumar 40.072 intervenciones anuales, el último año con datos oficiales (2014) la bajada fue casi de un 20%, 32.154 intervenciones.

La Sociedad Española de Contracepción considera que "la crisis pudo influir en la demanda de métodos definitivos entre 2008 y 2010, ya que ambos están cubiertos por la cartera de servicios de la Seguridad Social". Sin embargo, achacan su frenada a la aparición de otros métodos "muy fiables y de larga duración", como el DIU o el implante. También al hecho de que los españoles están retrasando la edad en la que se emparejan y tienen hijos.

La SEC, sin embargo, denuncia que existe disparidad en la cobertura pública de los métodos anticonceptivos reversibles y de larga duración por territorios. "Nos resulta difícil entender cómo en unas áreas sanitarias el DIU o el implante se coloca en la Seguridad Social, o la píldora poscoital se expide gratuitamente, pero en otras áreas, incluso dentro de la misma provincia, no es así", expone Rey Novoa. "Es terriblemente variable y no depende de la normativa general, sino de las gerencias de turno", se lamenta.

En estos momentos, la SEC trabaja en un proyecto de elaboración de un mapa sobre la cobertura en anticoncepción en Castilla y León con el que pretenden demostrar la inequidad en la oferta pública de los anticonceptivos y pedir al Ministerio de Sanidad que equipare los derechos de los españoles en la salud reproductiva.

Por su parte, la socióloga Teresa Castro cree que la bajada de la demanda de métodos de esterilización está directamente ligada al hecho de que España "está entre los países con la edad al primer hijo más alta de Europa, y por tanto del mundo". Para ella, si se retrasa la maternidad y se tienen pocos hijos, la esterilización pierde sentido. Otro factor a tener en cuenta es "que por alguna razón histórica, en España se usa mucho más que en otros países el preservativo, puede que porque la gente no se empareja hasta muy tarde. Y cuando lo hace imagino que continúa usándolos, porque ya están acostumbrados".

El 24,7% de las mujeres no usan ningún método

En agosto de 2016 la SEC entrevistó a 2.200 mujeres de 14 a 49 años sobre su salud sexual. Las principales conclusiones de esta encuesta (PDF) indican que mientras las mujeres más mayores comenzaron a tener relaciones sexuales a los 19 años, las adolescentes de ahora empiezan mucho antes, a los 16 años. En su primera relación el 81% utilizó algún anticonceptivo, pero el otro 19% no lo empleó. El observatorio de la SEC ha comprobado que existe entre las mujeres un mayor desconocimiento sobre los métodos anticonceptivos de larga duración. Así, lo cierto es que el más conocido es el DIU (que dicen conocer el 67,7% de las consultadas), lejos del implante o Essure, rodeado de polémica últimamente por sus efectos secundarios, que conoce el 27,9%, la píldora el 15,6%, el anillo vaginal, un 13,1% o el parche (11,8%).

En España hay un 24,7% de mujeres en edad fertil que no usan anticonceptivo, aunque son un 16,4% de las que aseguran que mantienen relaciones sexuales. Salvando las gestantes, o las que están en deseo de gestación o con la menopausia, el resto esgrime razones como "problemas de salud", "efectos secundarios", "no son cómodos", "el varón no quiere", "por ideología" y "por precio". La SEC concluye en su estudio que hay casi un 11% de mujeres en riesgo de embarazo no planificado.

Las parejas que sí usan anticonceptivos se decantan principalmente por el preservativo (28,4%), la píldora (21,7%), la vasectomía (4,5%), el DIU (3,5%), el anillo vaginal (3,4%) y la ligadura (3,3%). La SEC observa un aumento de las usuarias de la contracepción hormonal, respecto a anteriores oleadas de este mismo estudio, principalmente entre las mujeres de 20 a 30 años. Y el mayor número de usuarias de la esterilización es ya a partir de los 45 años.

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