Un zoo de China ha causado la indignación en medio mundo al atar a un banco a un tigre siberiano dentro de una jaula para que los clientes, tanto adultos como niños, pudieran subirse a él y hacerse fotos. Los propios domadores del zoo fueron los que apresaron al gran felino y animaron a los clientes a subirse en él, "¿No es genial?", les decían, según informa 'The Indian Times'.
El tigre en todo momento presentaba mala cara y reaccionó violentamente cuando lo soltaron.
Animalistas de distintos países han advertido de que estas conductas repercuten seriamente en la salud de este tipo de animales y piden que se detengan estas actividades perjudiciales.
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