El profesor de un colegio de Torre del Mar, núcleo de la localidad malagueña de Vélez-Málaga, detenido la pasada semana en relación con presuntos abusos sexuales a alumnas, ha sido detenido de nuevo tras presentarse voluntariamente este pasado domingo en dependencias policiales y autoinculparse, han confirmado a fuentes policiales.

Así, según las fuentes policiales, se presentó en la Comisaría provincial de forma voluntaria "y se autoinculpó de unos hechos que se están investigando" en relación con presuntos abusos. Según avanza el Diario Sur, el hombre habría confesado abusos a otras niñas fuera de la provincia de Málaga. Por el momento, la investigación continúa abierta.

Cabe recordar que el Juzgado de Instrucción número 1 de Vélez-Málaga había decretado libertad con cargos para el docente. El juez de guardia le imputaba supuestos abusos sexuales a menores y le había impuesto medidas cautelares de alejamiento al colegio y prohibición de comunicación con las supuestas víctimas, según ha informado a Efe fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

La Policía mantiene abierta la investigación para esclarecer cuántas menores podrían haber sufrido los supuestos abusos y, según han asegurado a Efe fuentes cercanas a la investigación, cinco menores ya han declarado en relación con este asunto, aunque no han podido precisar si todas son posibles víctimas.

Al profesor, de unos 40 años, casado y con hijos, se le sometió a un seguimiento durante el cual fue sorprendido junto a una niña en el pasillo que no se usa para ninguna actividad docente, y el hombre reaccionó de un modo extraño.

Hasta ahora, han sido identificadas tres niñas de 10 y 11 años que podrían haber sufrido abusos, aunque se investiga si existen más víctimas.

Por su parte, la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía ha suspendido de manera provisional de sus funciones al profesor detenido. Así, tras tener conocimiento de la primera detención, fue sustituido al día siguiente. En este sentido, desde el Gobierno andaluz han señalado que mientras se lleva a cabo la pertinente investigación policial se ha tramitado una propuesta de incoación de expediente disciplinario acompañada de la medida cautelar de suspensión provisional de funciones, siguiendo así lo establecido por la normativa.

Desde la Delegación de Educación han trasladado en un comunicado su "total repulsa" por actitudes de este tipo que "en ningún modo pueden tener cabida en un centro docente", siendo la "máxima preocupación" atender, con los medios necesarios, al alumnado "que pueda haberse visto afectado".

Han incidido en la "total diligencia, discreción y celeridad con la que han actuado los miembros del equipo directivo de dicho centro tras tener conocimiento de los primeros elementos indiciarios".

Tras ser puestos los hechos en conocimiento de la Delegación, a través del servicio de Inspección, se informó también a la Dirección General de Profesorado y Gestión de Recursos Humanos de la Consejería de Educación y de la Fiscalía de Menores "para valorar las posibles medidas a adoptar".

El centro, han resaltado, activó "inmediatamente" el protocolo de Maltrato Infantil previsto en la Orden de la Consejería de Educación de 20 de junio de 2011 por la que se adoptan medidas para la promoción de la convivencia en los centros docentes sostenidos con fondos públicos y se regula el derecho de las familias a participar en el proceso educativo de sus hijos.