La siniestralidad en el tráfico está aumentando, y hay que tomar medidas para invertir la tendencia. Un mes después de confirmar un mal año en cuanto a cifras de fallecidos en accidentes de tráfico, la Dirección General de Tráfico (DGT) lanza un paquete de medidas urgentes para mejorar la seguridad vial en las carreteras españolas.

Las carreteras secundarias es donde más siniestralidad se registra debido, entre otros factores, a la alta presencia de cruces entre distintas vías, lo que aumenta la posibilidad de una colisión frontolateral. Por este motivo, una de las primeras medidas se centrará en las confluencias más peligrosas en carreteras convencionales. Allí se van a instalar hasta 45 cruces inteligentes, un sistema de señalización dinámica que avisa de la presencia de vehículos en dichas intersecciones.

En España ya hay cuatro cruces inteligentes funcionando desde el pasado mes de abril. Concretamente, se localizan en León (en la N-VI, en el punto kilométrico 399); Madrid (en la N-VI, pk 56); Navarra (N-113, pk 78) y A Coruña (N-634, pk 676). En estos cuatro puntos se concentraron 48 accidentes entre 2012 y 2014, con el resultado de 3 fallecidos y 74 heridos. En esta ocasión la DGT seleccionó estas localizaciones por su peligrosidad, pero también por disponer de una configuración más adecuada para la colocación de estos sistemas. Tráfico todavía no ha informado de dónde se instalarán los 45 nuevos cruces inteligentes, pero se aplicarán criterios de selección similares.

A los denominados cruces inteligentes se los conoce como sistema de advertencia dinámica en intersecciones y utilizan la tecnología V2V, es decir, basada en el intercambio de información entre vehículo-infraestructura-vehículo. Es una tecnología de bajo coste y eficaz en su objetivo de advertir a los vehículos que circulan por la vía principal con preferencia de la proximidad de otros vehículos a la intersección.

¿Cómo funcionan? La señalización variable luminosa instalada en cruces peligrosos se activa cuando detecta la proximidad de un vehículo a la intersección, y así el conductor que circula por la vía principal puede moderar la velocidad y extremar la precaución. El conductor será avisado del peligro no sólo a través del panel luminoso, también con la emisión de ondas de corto alcance. Además, si el vehículo dispone de un sistema de comunicación con las infraestructuras, también recibirá una señal acústica o luminosa en el cuadro de instrumentos.

Los detectores de presencia se instalan en el asfalto y se distribuyen en cuadrículas para detectar al vehículo en cualquier posición. La DGT ha previsto una inversión de 2,4 millones de euros para poner en marcha estos nuevos 45 cruces inteligentes por las carreteras secundarias españolas.