Los presupuestos participativos que puso en marcha el año pasado el Ayuntamiento de València avanzan, pero aún están lejos de involucrar a un segmento significativo de los vecinos de la ciudad. En la edición de 2017 han sido 15.338 las personas que han participado en la consulta por distritos para decidir el destino de 7 millones de euros en inversiones municipales. Esta cifra representa un 2,3% del censo electoral (empadronados en València mayores de 16 años), frente a los 6.000 participantes del año pasado, que supusieron el 0,9% del censo.

En este proceso, bautizado como #decidimVLC y en cuya página web se pueden consultar los resultados al detalle, han sido aprobados 71 proyectos de las 115 propuestas finalistas. En cuanto a los proyectos concretos aprobados, destacan la reurbanización de la calle Murta, en Benimaclet, "una reivindicación histórica del vecindario", según el concejal de Participación, Jordi Peris; la recuperación de la plaza de Rojas Clemente, en Extramuros, o la reconversión de algunos solares, también históricos, en jardines. En total, se destinarán 1,96 millones de euros de los presupuestos participativos para rehabilitar jardines.

La Concejalía de Urbanismo gestionará 1,78 millones y la de Movilidad, 1,76 millones, que permitirán la construcción de nueve carriles-bici, mientras el área de Deportes recibirá 80.000 euros. Por distritos, los más participativos han sido Pobles del Sud, del Nord y de l’Oest, Patraix, Benimaclet y Ciutat Vella. El proyecto más votado ha sido el anillo de peatones Tres Forques-Patraix.

Entre las nuevas vías ciclistas aprobadas se encuentran las proyectadas en la calle Jesús y Gaspar Aguilar, en la Gran Vía Germanías (junto a un palmeral), en Juan XXIII, Santos Justo y Pastor, Instituto Obrero Valenciano, avenida Constitución, General Avilés y Maestro Rodrigo, la bajada de la vía a la calzada en la avenida del Puerto o la conexión ciclopeatonal del barrio de Nazaret con Quatre Carreres.

En el listado de proyectos aprobados también se encuentra la instalación de sonómetros en Ruzafa tras las quejas vecinales por contaminación acústica, y de paneles luminosos para prevenir este fenómeno en Ciutat Vella, otra zona conflictiva.

Una de las propuestas estrella aprobadas es la reurbanización de las avenidas Giorgeta y Pérez Galdós, y la pacificación del tráfico en ambas. Una actuación similar se hará en la avenida Constitución, así como la remodelación del parque Manuel Granero de Ruzafa.

Peris ha destacado, en la presentación de los resultados del proceso participativo, "la trascendencia e importancia" de esta fórmula porque los proyectos finalmente aprobados "van a transformar la vida cotidiana de todos los barrios de la ciudad" y ha añadido que el procedimiento "pone la Administración pública al servicio de la iniciativa ciudadana".