El empresario recibió la adjudicación de unas obras por las que el ayuntamiento recibía una subvención de la Xunta de Galicia. En tanto que pasaba el tiempo y las obras no arrancaban, el gobierno local constató que el empresario carecía de medios y recursos para ejecutarlas y le retiró la adjudicación.

Con todo, el hombre envió una certificación de las obras presuntamente ejecutadas por valor de 11.600 euros con cargo a esa adjudicación, que ya le había sido suspendida.

En ese documento aparecía la firma del alcalde de Becerreá "falsificada", por lo que Martínez presentó una denuncia que desembocó en la detención del empresario.

El regidor ha explicado que el objetivo del Ayuntamiento es recuperar el dinero que perdió de la subvención de la Xunta de Galicia, que ascendía a 70.000 euros, "para resarcir las arcas municipales de esa pérdida". Con tal fin, ha avanzado que continuarán con el procedimiento judicial.