Dos fiscales fueron tiroteados este viernes cuando estaban en una reunión en la sede del Ministerio Público del estado brasileño de Río Grande do Norte (noreste) por un funcionario que posteriormente se dio a la fuga, informaron fuentes oficiales.

El estado del procurador general adjunto de Río Grande do Norte Jovino Pereira y el fiscal Wendell Beetoven es "estable", tras haber sido sometidos a una intervención quirúrgica, si bien su vida no corre peligro, dijeron fuentes del Ministerio Público estatal.

Pereira fue alcanzado dos veces en el abdomen, mientras que Beetoven los disparos le afectaron parcialmente el pulmón.

De acuerdo con la Policía Militar brasileña, el autor de los disparos ha sido identificado como Guilherme Wanderley Lopes, de 44 años, que trabajaba en la Fiscalía regional, ubicada en Natal, la capital de Río Grande do Norte.

El sospechoso "consiguió huir del edificio sin poder ser capturado" por las autoridades, aunque antes realizó más disparos en el aparcamiento, que no causaron víctimas, agregaron las fuentes.