Sin duda, una de las canciones que más se prestan a bailarse o cantarse en un avión es Toxic, una canción de Britney Spears del año 2.003 cuyo videoclip estaba ambientado en un vuelo.

La canción ha vuelto a ser un fenómeno gracias a la coreografía de un azafato de Air Asia llamado Assraf Nasir, que aprovechó un avión Airbus vacío para grabar el vídeo, que ha sido compartido miles de veces en redes sociales. Y es que el auxiliar de vuelo,como se puede comprobar en sus perfiles de redes sociales es todo un experto en baile que clava la coreografía de la que fuera la 'princesa del pop'.

El baile ha llegado tan lejos que el CEO de la compañía, lejos de echarle una bronca por usar el avión fuera de horas de trabajo le felicitó por el trabajado baile y su éxito: "El talento de esta aerolínea nunca me deja de sorprender".

Ahora sólo falta que la propia Britney lo vea y le felicite.