El Ayuntamiento de Barcelona captó 1.097 pisos en 2016 para alquiler asequible a través de diversos mecanismos, que están o estarán en las próximas semanas disponibles, ha explicado la teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laia Ortiz, junto al concejal de Vivienda, Josep Maria Montaner.

En rueda de prensa este jueves, han detallado que 101 de estos pisos parten de la campaña de captación de vivienda vacía 'Tu tens la clau', con incentivos para los propietarios -hasta 15.000 euros para rehabilitación y garantía de cobro de alquiler-, de los que no han concretado cuántos están ya ocupados y en los que calculan que los inquilinos paguen alrededor de 200 euros al mes, la media del Patronato Municipal de Vivienda, según el gerente del área, Javier Burón.

Han movilizado otros 154 pisos mediante el tanteo y retracto -y otros 215 están en proceso-; 250 han sido cedidos por entidades financieras -con 200 de la Sareb acordados en 2015 y cedidos el año pasado-; otros 250 con convenios con entidades sociales, como Hábitat 3, y 50 con el programa 'Hosing First'.

Montaner ha destacado que, en aplicación del Plan de Vivienda -aprobado el pasado enero-, el parque público de vivienda que gestionará directamente el Ayuntamiento a final de mandato pasará de ser de 6.500 a 10.000 pisos, y ha señalado que el Consorcio de Vivienda destinó 22 millones de euros a ayudas al alquiler, un 10% más, para 9.355 unidades convivenciales.

Ha destacado que hay 26 operaciones en construcción o fecha de inicio prevista, con 1.811 pisos, y que siete solares están en proceso de concurso público, tras lo que ha señalado que los inscritos en el registro de solicitantes de vivienda aumentaron un 8,5% hasta las 30.637 familias y que las adjudicaciones de vivienda de protección aumentaron otro 17%, con 441.

Ortiz ha asegurado que el Ayuntamiento ha aportado 160 millones a la vivienda en 2017 -el 90% del total teniendo en cuenta a otras administraciones, con 20 millones-, aumentando desde los 70 de 2016 -el 70% de un total de 81- y los 45 de 2015 -el 74% de 61-, un esfuerzo sin precedentes, según ella: "Nunca se había hecho tanto en tan poco tiempo".

"Por mucho que pongamos toda la maquinaria y todos los recursos en funcionamiento, necesitamos que el conjunto de administraciones remen en la misma dirección", porque una ciudad no puede hacer frente a una ola especulativa para proteger la vivienda, ha dicho Ortiz, quien ha exigido que el plan estatal considere la vivienda una infraestructura básica para protegerla.

Ha llamado a impulsar medidas para a evitar una burbuja y "comportamientos buitre que usan la vivienda como fuente de dinero rápido", por lo que ha insistido en la necesidad de promover una legislación que no permita que especuladores compren viviendas con inquilinos.

Pide al Gobierno central que legisle para garantizar la protección de los inquilinos, apueste por la rehabilitación, limite los alquileres abusivos -es la "única manera de poder combatir la especulación"- y dote a las ciudades de capacidad inversora para ejercer el derecho de tanteo y retracto para adquirir pisos por debajo del precio de mercado.

A la Generalitat, ha pedido que invierta más recursos en vivienda, y regule estos alquileres abusivos -considera que puede hacerse tanto del Gobierno central como desde el Govern-, y ha avisado: "O asumen el resto de administraciones la voluntad de legislar, o pedimos que nos deleguen esta capacidad".

Preguntados por si están previstas cesiones de pisos de entidades financieras, Burón ha asegurado que hay negociaciones pero no ve interés, a lo que Ortiz ha añadido que "ha habido cambios en el funcionamiento del mercado y han cambiado lo incentivos de las entidades, que al principio tenían más interés y, en el momento en que se ha ido alquilando y vendiendo más rápidamente, ese interés se ha reducido".