El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que este mayo se iniciará la construcción del mercado provisional de Sant Andreu, al que se trasladarán un total de 23 comerciantes, con el objetivo de iniciar las obras de remodelación del antiguo mercado, que se encuentra en fase final de redacción de proyecto y que tendrá un coste total de 9,5 millones de euros.

El consistorio, a través del Instituto Municipal de Mercados, realizará las obras del emplazamiento provisional, que estará situado en la calle Sant Adrià, entre las calles Segre y de Otger. Estas durarán cuatro meses, por lo que el traslado de los comerciantes se prevé durante el mes de septiembre de 2017.

La concejal de Comercio y Mercados, Monsterrat Ballarín, ha destacado que la carpa provisional permitirá que los comerciantes y los vecinos puedan disfrutar de un espacio de "mucha calidad", y ha observado que la remodelación del antiguo mercado ayudará a mejorar su integración con el entorno.

"Será un mercado absolutamente transparente, en el que se verá todo lo que sucede en el entorno", ha expresado, y también ha destacado que se convertirá en un motor para el comercio de proximidad de su entorno y para revitalizar la zona comercial, así como dar servicio a los vecinos del entorno.

El mercado provisional estará formado por dos módulos encajados, el primero de diez metros de amplitud y 17 de largo, que acogerá siete establecimientos no alimentarios, y el segundo de 15 metros de amplitud y 63 de largo, que incluirá los 18 paradistas de alimentación y distintos servicios.

El proyecto de remodelación del mercado de Sant Andreu de la plaza Mercadal prevé que el equipamiento se componga de dos espacios: el edificio central, en el que se concentrará la oferta de producto fresco, y el llamado 'Local de Ventas', en el que estarán los establecimientos no alimentarios.

El volumen del edifico se verá rebajado, de forma que el impacto visual, tanto a pie de calle como a nivel de los edificios de los alrededores, y, además, gran parte del perímetro del mercado será de cristal, lo que le dotará de una gran transparencia visual. Las obras de remodelación prevén durar 18 meses.

El edificio del mercado estará formado por dos plantas, un planta baja y un subterráneo: el primero contará con espacio de venta de producto fresco, uno destinado a la restauración, un punto de información y un espacio para los deshechos, mientras que el segundo acogerá un espacio de logística del mercado.