El 75% de los accidentes mortales se producen en carreteras secundarias. Vías con un carril en cada sentido, invasión del carril contrario al realizar un adelantamiento, intersecciones e incorporaciones al mismo nivel, peor visibilidad, infraestructuras en peor estado... Son varias las razones que hacen que las carreteras convencionales sean las más peligrosas.
La Dirección General de Tráfico (DGT) lleva poniendo el foco de sus actuaciones en este tipo de vías desde hace tiempo. Pero es en 2017, a raíz de anunciar el primer aumento de la siniestralidad en 13 años, cuando ha iniciado un plan de medidas urgentes para frenar esta tendencia, principalmente en las carreteras secundarias. Y una de esas medidas anunciadas por el Ministerio de Interior consiste en instalar avisadores de velocidad.
La velocidad inadecuada es la segunda causa de siniestralidad, por detrás de las distracciones. Los últimos datos de la DGT indican que las vías convencionales limitadas a 90 kilómetros por hora son las carreteras donde más se incumplen los límites de velocidad. Concretamente 4 de cada 10 conductores circulan a más velocidad de la permitida, un 25% superan la velocidad en más de 10 km/h y un 12% en más de 20 km/h.
Un panel alertará que estás excediendo la velocidad
Para disuadir a estos conductores la DGT ha decidido instalar 250 avisadores de velocidad en carreteras secundarias. Los encontraremos en los trazados más críticos, como en curvas de radio reducido, en proximidades a poblados, etc. Si excedes la velocidad permitida, el sistema lo va a detectar y te va a avisar. ¡Cuidado! Usted circula a 92 km/h, a 83 km/h o a 74 km/h (dependerá de la velocidad máxima en dicho punto).
Estos avisadores de velocidad consisten en paneles de señalización dinámica para prevenir los excesos de velocidad. Su funcionamiento combina una parte fija con el límite de velocidad legal establecido, y una parte variable de luces LED's, que detecta la velocidad real de circulación del vehículo. Un sensor con tecnología Doppler es el encargado de detectar a los vehículos que exceden el límite de velocidad y es en ese momento cuando dos focos LED's se activan emitiendo destellos para alertar al conductor que está incumpliendo la norma. Estos avisadores de velocidad son frecuentes encontrarlos en vías urbanas.
La velocidad es uno de los factores que determina la mayor o menor gravedad del accidente y el grado de lesión de las víctimas. Por eso es importante no exceder estos límites. Con esta nueva medida, la DGT quiere prevenir los accidentes causados por circular a velocidad excesiva en tramos viarios específicos, especialmente en los que tienen puntos negros de siniestralidad. La instalación de estos 250 avisadores de velocidad en carreteras secundarias tendrá un coste de un millón de euros.
Incumplir los límites de velocidad tiene castigo
Recordamos que el límite de velocidad en carreteras secundarias para turismos y motos es de 100 km/h o de 90 km/h en función de la anchura del arcén. El incumplimiento de estos límites supone una infracción grave o muy grave castigada con multas de 100 a 600 euros y la retirada de entre 2 y 6 puntos del carnet de conducir.
Si el exceso de velocidad supera en 80 km/h el límite establecido en vía interurbana, se considera delito contra la seguridad vial. En este caso el castigo es pena de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, supone la retirada del carnet de conducir vehículos a motor desde 1 a 4 años.
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