Desde el pasado año se está consolidando la cooperación y el aprendizaje mutuo entre los bancos de tiempo malagueños y de esta región italiana, según han indicado desde el Consistorio en un comunicado.

Las VIII Jornadas Bancos del Tiempo comenzarán con la ponencia 'La participación como fortalecimiento de la democracia, el reto de construir entre todos un mundo mejor', a cargo del profesor de la UMA Jose Manuel Oña. Seguidamente se abrirá una mesa redonda en la que se expondrán las experiencias de participación social desarrolladas en los bancos del tiempo en España y en Italia.

Finalizarán con una segunda mesa redonda en las que se darán a conocer otras iniciativas de participación social desarrolladas en Málaga. Participarán en ellas representantes de La Casa Invisible, el Plan Comunitario de Palma-Palmilla, Proyecto Hogar, Jardín de Gamarra y Asociación de Mujeres Trinidad Perchel.

Los bancos del tiempo fomentan la cooperación y el aprendizaje mutuo entre personas y el conocimiento de otras culturas. En la actualidad son casi 2.200 personas de 18 a 86 años las que participan en alguno de los ocho activos en Málaga.

Por sexo, son las mujeres las que están más implicadas en este proyecto social, sumando un 64 por ciento de los participantes. En cuando a edades, el tramo comprendido entre 46 y 55 años es el más numeroso seguido por los que tienen de 36 a 45 y los que suman más de 55 años.

Desde su creación en el año 2009 en la zona Pepri del Centro, dentro de la iniciativa urbana 'Arrabales y Carreterías', se ha extendido por toda la ciudad, llegando también a Carretera de Cádiz, Bailén-Miraflores, Málaga-Este, Churriana, Teatinos, Ciudad Jardín y Cruz de Humilladero. Desde la puesta en marcha del Banco del Tiempo en Málaga se han celebrado 14.765 intercambios de servicios por tiempo, que superan las 30.000 horas.

Servicios tan necesarios como acompañamiento a citas médicas, respiro familiar, apoyo para hacer la compra o cuidado de animales; reparaciones en el hogar, como colgar un cuadro o arreglar un grifo que gotea; enseñanzas básicas para manejarse en la cocina, dominar las nuevas tecnologías o descubrir otro idioma; o actividades para el bienestar de cuerpo y mente, como taichi, yoga o masajes son algunas de las actividades que se pueden intercambiar en el Banco del Tiempo. Destacan también propuestas originales como manejo de teléfonos móviles, paseos en embarcaciones o pilotaje de drones.