Un juzgado de Amsterdam ha condenado a penas de hasta tres años de prisión a diez miembros de una banda criminal que empleaba cocodrilos para vigilar una habitación en la que escondían dinero en efectivo, informó hoy el portal de información DutchNews.

Los diez delincuentes, de entre 24 y 61 años, fueron detenidos en febrero de este año por operar una red a gran escala de tráfico de drogas sintéticas, como cristales de metanfetamina o anfetaminas.

Durante la redada policial en las casas de los sospechosos, los agentes encontraron 300.000 euros en efectivo, varios kilos de metanfetamina por valor de medio millón de euros, armas, munición y una plantación de cannabis.

Según el informe de la Policía holandesa, publicado en su sitio web el día de la detención, la mayor parte del dinero en efectivo se encontraba en maletas en una habitación custodiada por dos cocodrilos. "Para acceder al dinero, un supuesto ladrón tendría que superar los cocodrilos", señaló la Policía en su comunicado.

El principal sospechoso, un hombre de 56 años procedente de Amsterdam que se encargaba de comprar las drogas para elaborar el material sintético, fue condenado a tres años de cárcel, mientras que el encargado de promocionar las sustancias una vez fabricadas, de 30 años, pasará dos años en prisión.

El resto de los detenidos fueron condenados a sentencias menores, multas de hasta 10.000 euros y horas de trabajos comunitarios en libertad condicional.