El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este miércoles la aprobación, mediante una orden ministerial del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, del Plan de Conservación de la orca (Orcinus orca) del Estrecho y golfo de Cádiz cuyo objeto es el de "gestionar de forma activa" dicha población de orcas mediante el impulso y la puesta en marcha de medidas específicas que "favorezcan su supervivencia y garanticen su buen estado de conservación".

Según expone el BOE, estas actuaciones van dirigidas a la "protección, conservación y recuperación tanto de la población de orcas como de su hábitat, basándose en la mejor información científica disponible y teniendo en cuenta las características socioeconómicas del entorno".

De este modo, en la medida en que se produzcan variaciones sustanciales en el estado de conservación de la especie o en el de su hábitat, o en los factores que ponen en riesgo su supervivencia, dicho Plan podrá ser sometido a una revisión total o parcial. Asimismo se designan mediante la orden ministerial áreas críticas y se establecen medidas generales de protección para esta población de orcas.

Para la elaboración del Plan de Conservación han servido de base los resultados de los programas de investigación realizados desde 1999 en el Estrecho y el golfo de Cádiz por la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y diferentes organismos y organizaciones científicas privadas y públicas.

No obstante, el logro de los objetivos del Plan de Conservación pasa "indefectiblemente" por un "incremento del conocimiento" de la población y del hábitat de las orcas del Estrecho y golfo de Cádiz, así como del estado de conservación de ambos, y así está previsto en el mismo.

Asimismo, es también "fundamental para garantizar el éxito" del Plan de Conservación lograr "un cambio y una mejora en la sensibilidad de la sociedad hacia la especie", principalmente la de aquellos colectivos cuyas actividades pueden tener una mayor repercusión sobre ella.

Las orcas del estrecho de Gibraltar y golfo de Cádiz forman parte de la población más meridional del Atlántico nordeste y son consideradas una unidad de gestión independiente dentro de la misma que en los últimos tiempos está viendo amenazada su supervivencia debido a "efectos negativos de distinta índole y cuyo reducido tamaño contribuye a su mayor vulnerabilidad".

En primer lugar, como consecuencia de su especialización trófica, se cree que la especie podría ser especialmente vulnerable a una reducción en la disponibilidad de sus presas, ya sea debido a la sobrepesca o a los efectos del cambio climático.

Las principales amenazas para estas orcas son la interacción de la especie con pesquerías y embarcaciones así como la degradación de su hábitat debido a la construcción de infraestructuras en alta mar, el ruido submarino, el intenso tráfico marítimo, el progresivo aumento de la industria turística de observación de cetáceos en la zona, o la contaminación de las aguas.

Así, en comparación con otras poblaciones, como las de Noruega o de Columbia Británica, en las que se han llegado a identificar más de 300 individuos, y teniendo en cuenta la capacidad de carga de su hábitat, el tamaño poblacional de las orcas del Estrecho y golfo de Cádiz es "muy inferior" al esperado en una situación favorable para su conservación. Se cree que probablemente no supera los 50 individuos.

Así, la población de la orca del estrecho de Gibraltar y golfo de Cádiz se halla incluida en la categoría vulnerable del Catálogo Español de Especies Amenazadas. Con tal motivo, se debía adoptar un plan de conservación que incluya las medidas más adecuadas que permitan eliminar los factores de amenaza que afectan a esta población y llevar a término las actuaciones necesarias para su preservación.