El expresidente de EE UU Barack Obama y su esposa Michelle disfrutan estos días de unas vacaciones en Italia, aunque tal vez no están siendo todo lo tranquilas que esperaban. La pareja es tan popular en el país europeo que, tratados como auténticas estrellas de rock, apenas pueden pasear como unos turistas más sin ser abordados por los transeúntes que les reconocen.

El portal TMZ mostraba unas imágenes del exmandatario estadounidense saludando y haciéndose fotos con decenas de personas por las calles de Bolonia, y un día antes, el demócrata estuvo jugando al golf en el resort Bosco, en Siena, mientras su esposa disfrutaba de unas compras y una comida en uno de los restaurantes de la ciudad, donde tampoco pasó inadvertida.

Los Obama han coincidido en suelo italiano con el actual presidente de EE UU, Donald Trump, quien llegó este miercoles al Vaticano, dentro de una gira internacional que le ha llevado también a Arabia Saudí e Israel.

Trump estuvo acompañado por su hija Ivanka y su mujer, Melania, ambas vestidas de riguroso luto. Los tres miembros de la familia presidencial departieron con un Papa Francisco que se mostró frío y que pareció marcar distancias hasta para las fotos oficiales.

Melania cumplió con el protocolo y se cubrió la cabeza con una mantilla, mientras que la primogénita de la saga optó por un tocado con velo que fue criticado en redes sociales.