El vicepresidente del Govern y conseller de Innovación, Investigación y Turismo, Biel Barceló, ha culpado al Govern del PP en la pasada legislatura de la disolución del Consorcio de la Playa de Palma, debido a que se han dejado de justificar un total de 12 millones de euros de los convenios estatutarios (de los años 2009 y 2010) que ahora reclama el Estado.

Así lo ha manifestado Barceló durante una comparecencia parlamentaria en la Comisión de Turismo, solicitada por el Grupo Parlamentario Popular, quien ha explicado que la "nula gestión" de los 'populares', entre los años 2011-2015, de las inversiones estatutarias y a la "actitud poco colaboradora del Estado", que ahora ha decidido salir del Consorcio, han provocado que esta entidad haya entrado en un proceso de disolución.

Según ha expuesto en su comparecencia el vicepresidente, los convenios de inversiones estatutarias para el Consorcio de Playa de Palma de los años 2009 y 2010 ascendían a 20 millones de euros (10 millones por cada uno de ellos), de los cuales tan solo se ejecutaron 4,6 millones hasta el año 2011. "Entre los años 2011 y 2015 no se va a invertir nada", ha censurado el conseller de Turismo.

En este punto, ha indicado que la Comunidad Autónoma ha presentado justificación del "máximo de gastos posibles", teniendo en cuenta que el plazo de ejecución acababa en 13 de agosto de 2015, cinco semanas después de la toma de posesión del Govern.

"El Govern ha presentado la justificación del máximo de gastos posibles, por valor de 8 millones, y quedan 12 millones sin justificar que ahora el Estado reclama", ha concretado el conseller de Turismo en referencia a los dos convenios de inversiones estatutarias que afectan al Consorcio.

EL ESTADO RECLAMA AL CONSORCIO OTROS 5 MILLONES POR CANTIDADES NO JUSTIFICADAS DE DOS CONVENIOS

Por otra parte, Barceló se ha referido a los dos convenios de colaboración suscritos entre el Gobierno y esta entidad. Uno de ellos firmado en 2008, mediante el cual el Estado aportaba 2,5 millones de euros y la Comunidad Autónoma otros 2,5 millones al Consorcio, de los cuales, según ha detallado, se ejecutaron actuaciones por un valor de 1,05 millones.

El otro convenio, con fecha de 2009, estaba dotado con 4 millones de euros; dos millones aportados por el Gobierno y otros 2 por la Comunidad Autónoma. "De este dinero no se ejecutó ni un sólo euro", ha precisado al respecto.

Así, del total de los 9 millones de los dos convenios, tan sólo se van a ejecutar y justificar 1,05 millones.

Ahora, el Estado reclama al Consorcio más de 5 millones de euros de cantidades no justificadas en estos dos convenios.

Con todo, Barceló ha admitido que la disolución del Consorcio "no será sencilla, porque hay cuestiones económicas y jurídicas complicadas", si bien, ha asegurado que actuarán con la "máxima celeridad" para que esta disolución sea efectiva lo antes posible.

"Por desgracia, quien ha perdido por culpa de toda esta situación es la Playa de Palma; los comerciantes, residentes, vecinos, restauradores, etc." ha lamentado el vicepresidente, quien ha constatado, que pese a todo, Baleares "sigue reclamando inversiones al Estado. No hemos renunciado a los 63 millones de euros que en su día el Estado se comprometió a invertir", ha sentenciado.

GIJÓN: "ESTE GOVERN NO HA INVERTIDO NI UN SOLO EURO A PLAYA DE PALMA"

En el turno de intervenciones, el diputado del Grupo Parlamentario Popular Álvaro Gijón ha señalado que "no deja de sorprenderle la capacidad que tiene este Govern de echar la culpa a los demás y que nunca es suya".

"Todo es culpa de los demás, pero la realidad es el escrito de la Secretaría de Estado de Turismo lo que reclama son convenios del año 2008 y 2009. Ustedes se acaban gastando el dinero que les dan sin tener en cuenta lo que dicen los convenios", ha espetado Gijón a Barceló.

"Ni usted, ni muchos de los grupos parlamentarios que están aquí, consideran que la Playa de Palma tenga que tener un trato preferencial por ser una zona madura. La realidad es que en la Playa de Palma no se ha invertido ni un solo euro", ha criticado el diputado 'popular' en relación a la gestión del actual Govern.