Ha asegurado que da cumplimiento a una aspiración de todos los ciudadanos, que piden una "captación responsable de un recurso esencial" como es el agua, con un tratamiento responsable y con todas las garantías, ha informado la Generalitat en un comunicado.

La nueva planta del Cat, que sustituye el cloro en el proceso de potabilización, mejora la calidad del agua, reduce el impacto en el medio ambiente y supone un ahorro económico de hasta 200.000 euros anuales.

En su discurso de inauguración, Puigdemont ha puesto de relieve que esta nueva instalación permite una gestión responsable del ciclo final del agua, y ha remarcado que es una "planta modélica y permite un tratamiento ejemplar".

"Espero que los ciudadanos noten también estas mejores en la eficacia", ha dicho Puigdemont, quien ha animado a los impulsores a continuar estando a la vanguardia de la gestión del agua.

La nueva planta de ozono del Cat, que consta de tres instalaciones diferenciadas, se ha construido en terrenos de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (Etap) de L'Ampolla.

Con una capacidad de 4 metros cúbicos por segundo, dará servicio a todo el sistema del Cat: 62 ayuntamientos y 26 industrias, que alcanzan el 85% de la población de la provincia de Tarragona, siendo 700.000 personas en invierno y 1,5 millones en verano.