El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, emplazó este viernes a analizar con detalle la propuesta de la primera ministra británica sobre los derechos de los no británicos una vez que sea efectivo el brexit y dijo que no puede decir que le haya "sonado mal", pero sí que le "podía haber sonado mejor".

Rajoy, en la conferencia de prensa que ofreció al término de la cumbre europea de Bruselas, puso en valor que May haya realizado una propuesta que afecta a los derechos de los ciudadanos porque esa es la prioridad de España en el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

"Nos congratulamos de que se esté dando prioridad a los derechos de los ciudadanos", recalcó el jefe del Ejecutivo español, quien remitió a que su homóloga concrete detalles de su propuesta la próxima semana ante el Parlamento británico.

Será entonces cuando España y el resto de países de la UE analicen esa oferta de forma pormenorizada.

Explicó los términos conocidos hasta ahora y que, según expuso este jueves May, supone que los ciudadanos europeos que residan actualmente de forma legal en el Reino Unido no sean expulsados con el brexit y los que lleguen hasta el momento de salida del país de la Europa comunitaria puedan regularizar su situación.

Añadió que se concederá el estatus británico de arraigo a cualquier ciudadano de la UE en el Reino Unido con cinco años de residencia en una fecha específica entre el momento de activación del artículo 50 de los tratados para la salida del país (marzo de 2017) y el momento de la marcha del país, prevista para marzo de 2019.

A cualquier ciudadano comunitario con menos de cinco años de residencia que llegue antes de una fecha de corte se le dará tiempo para quedarse hasta que cumpla esos cinco años, de cara a que pueda obtener el estatuto británico de arraigo.

Rajoy dijo que debe saberse, por ejemplo, en qué situación quedan esas personas hasta que cumplan los cinco años: "Esa batalla -aseguró- la daremos".

Recalcó también que se está en el "principio del principio" de las negociaciones del brexit, que "el camino se hace al andar" y que confía que, al final, no se vea perjudicado ningún ciudadano español ni europeo.

Al mismo tiempo, recordó que hay otros asuntos esenciales que deben abordarse en la negociación, como son la aportación económica del Reino Unido a la UE y la futura relación entre Irlanda e Irlanda del Norte.