La bailarina y modelo Coral González, que saltó a la fama por protagonizar una campaña de publicidad de una página de venta de segunda mano en la que decía "claro que sí, guapi", ha mostrado su disgusto por unas fotografías aparecidas en una revista.

En las imágenes la joven aparece en la playa junto a su novio y muestran escenas cotidianas y algunas de la balilarina haciendo piruetas, sin embargo, aparecieron sin su consentimiento.

González estudia una demanda por estas fotografías y acudió al programa Hora Punta, de La 1, a hablar del asunto, acompañada de una abogada especializada.

La bailarina explicaba que el motivo principal de su malestar es que en las imágenes aparezca su pareja. "Yo puedo entender que soy un personaje público, pero el entorno familiar y mi pareja quiero tenerlo aparte", explicaba González.

Sobre el caso, la abogada explicaba que la jurisprudencia es un poco ambigua, puesto que la joven puede reclamar su derecho al honor y a la intimidad, pero el dercho a la propia imagen, "desaparece al ser una persona con proyección pública en un lugar público y así lo dice la jurisprudencia".

Sin embargo, "está con su pareja, en una actitud cotidiana de la vida, así que colisionan derechos fundamentales", así que la pregunta del caso sería si un personaje público puede ejercer su derecho a la intimidad en un lugar público.