El Juzgado de lo Penal número 1 de Lugo ha condenado a dos años de prisión y a cuatro de inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad a una mujer por dos delitos de sustracción de menores con respecto a sus hijos, de 8 y 14 años, en el momento de los hechos. Los mantuvo "ocultos" a su padre en Ribadeo (Lugo).

Según la sentencia difundida por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), contra la que cabe recurso de apelación, también se condena por el mismo delito, en concepto de cómplice, a la abogada de la madre, a quien se impone un año de prisión.

En ambos casos se aplicaron los atenuantes de anomalía o alteración psíquica y dilaciones indebidas. El resto de acusados han sido absueltos.

Los hechos se remontan a julio de 2007, cuando V.L.A. y V.E.A.R. se divorciaron y la custodia de los hijos menores de la pareja se otorgó a la madre, estableciéndose un régimen de estancias y comunicaciones con el padre.

Un año más tarde, en 2008, V.E. formuló una denuncia contra su expareja por supuestos abusos sexuales hacia su hija, unas diligencias que tramitó el Juzgado de Instrucción de Castropol y que fueron archivadas en 2009 por la Audiencia Provincial de Asturias.

Tras recuperar el padre sus derechos sobre el régimen de visitas y pedir la modificación de las medidas acordadas en la sentencia de divorcio, se encadenan una serie de denuncias que culminan con una sentencia que otorgaba al padre en exclusiva la patria potestad.

OCULTOS CASI DOS AÑOS

La madre la recurrió, pero ésta fue confirmada. La sentencia recoge que, V.E.A.R., a sabiendas de su deber de entregar los hijos a su padre, con la finalidad de evitar el cumplimiento de las diversas resoluciones judiciales, se ocultó con los menores sin dar a conocer su paradero.

Fueron localizados por la Policía judicial en 2011 en una vivienda ubicada en Ribadeo (Lugo) y, según el fallo, durante el periodo en que estuvieron ocultos, los menores estuvieron "sin escolarizar y sin control médico alguno, permaneciendo la mayor parte del tiempo recluidos en la vivienda, de la que apenas salían para evitar ser descubiertos".

CÓMPLICE Y OTROS ACUSADOS

La coacusada y abogada de la madre, C.L.R.V., se habría mantenido durante todo el tiempo que duró la sustracción de los menores, en contacto permanente con la madre de los mismos, "dándole instrucciones de cómo debía actuar para no ser descubierta por la Policía".

Durante dicho periodo, los acusados F.A.N., M.R.B., padres de la acusada V.E., y los acusados M.J., I. y S.A.R., hermanos de la misma, estaban al tanto del paradero de ésta y de sus hijos.

Sin embargo, la sentencia no da por acreditado que dichos familiares hubiesen proporcionado a V. los alimentos y dinero en metálico necesarios para mantenerse oculta con los menores durante casi dos años. S.A.R. alquiló el inmueble donde la acusada y los menores fueron hallados siendo ésta quien abonaba la renta de los mismos.