El FMI receta a España más IVA, trabajar más años y no subir pensiones más del 0,25% anual

Integrantes del organismo internacional en la presentación de su último informe sobre la economía española.
Integrantes del organismo internacional en la presentación de su último informe sobre la economía española.
H.M.G.
Integrantes del organismo internacional en la presentación de su último informe sobre la economía española.

"España entra en el cuarto año de una impresionante expansión económica", relata el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el arraque de su último informe sobre la economía española. Cinco páginas que resumen un poco lo ya sabido por todos: que la recuperación "sigue intensa", que crecemos de forma "más equilibrada" y que al ladrillo le ha relevado el sector servicios para llevar al país a una "impresionante" creación de empleo.

"La consecuencia", según ha avanzado en rueda de prensa la jefa de la misión para España, Andrea Schaechter, "es que hemos revisado al alza las previsiones de crecimiento de España al 3,1% este año (cinco décimas más que su último cálculo) y al 2,5% en 2018 (cuatro más). Un augurio más en línea con los análisis del resto de organismos.

Desde la OCDE a la Comisión Europea han analizado el empuje económico español de forma parecido. Pero a la hora de las recetas, cada prescriptor tiene las suyas. El FMI ha expuesto las suyas este martes: hay que subir el IVA, elevar la edad de jubilación, reducir la dualidad laboral y seguir fusionando bancos.

"Es la hora de que España afronte las vulnerabilidades que tiene pendientes de solucionar", dice el organismo dirigido por la francesa Christine Lagarde. Se apunta a varios frentes de debilidad, desde la elevada deuda pública, a un alto desempleo estructural y a una reducida productividad. "Si no se solucionan, la economía española seguirá siendo vulnerable a los shocks y se arriesga a dejar atrás a algunos segmentos de la población".

Estas son las cuatro principales recetas que ha presentado hoy el FMI para España.

1. Pide subir el IVA para atajar la desigualdad

España necesita recursos para integrar a los parados mediante políticas activas de empleo y para reducir la desigualdad. Así que el FMI insiste en uno de sus análisis clásicos para financiar lo anterior: "España debe elevar progresivamente el IVA para algunos productos que ahora se benefician de un tipo reducido", aconseja el organismo, que recuerda que los ingresos españoles por este impuesto respecto al PIB son más bajos que en estados vecinos. "También habría que elevar los impuestos ambientales porque son inferiores a los países de la UE", añade.

El FMI no olvida que la deuda pública española supera el 100% de su PIB, así que pide cautela con las alegrías fiscales. Preguntada por la reducción del IRPF prevista para 2018  [una exigencia de Ciudadanos a Montoro a cambio de su apoyo al techo de gasto], la portavoz del organismo en España, Andrea Schaechter, se ha limitado a aceptarla "siempre que no ponga en peligro la senda de reducción de déficit y deuda".

Eso sí, el informe del Fondo advierte que sigue habiendo margen para meter la tijera. Y sin especificar en qué partidas, sugiere que "seguir incrementando la eficiencia del gasto público" ayudaría a esta consolidación fiscal.

2. Sugiere que las pensiones sigan subiendo solo el 0,25%

"La demografía es un factor clave para las pensiones", ha apuntado Schaechter en rueda de prensa. El FMI subraya que la esperanza de vida va a seguir creciendo hasta 2027, el año en que entrará en vigor en plenitud la jubilación a los 67 años. Así que el factor de sostenibilidad que se definió en la reforma de 2012 ya estaría caduco.

El organismo prefiere no fijar la edad de jubilación de vez en cuando, sino que vaya adaptándose automáticamente en función de la esperanza de vida como en varios países". Su informe, por ejemplo, propone "incentivar una vida laboral más larga" y desaconseja "hacer cambios puntuales en el índice de revalorización de las pensiones". Es decir, que no vuelvan a vincularse a la inflación.

En el fondo, lo que implica no cambiar el índice de revalorización es que las pensiones sigan actualizándose un 0,25% cada año mientras las cuentas públicas sean deficitarias, que es lo que ha pasado en los últimos años y lo que seguirá pasando previsiablemte hasta más allá de 2021.

Como la reforma que introdujo el PP no permite subirlas más de ese porcentaje mientras haya déficit, los pensionistas perderían poder adquisitivo cada ejercicio en que los precios suban por encima de ese mínimo. Es lo que sucedió en 2016, cuando la inflación se disparó al 1,6% tras dos años en negativo. Y es lo que pasará este año si se cierra en el 1,5% que prevé el Gobierno.

Schaechter ha señalado que el ratio entre la pensión media y el salario en España "debe bajar" para que el sistema sea sostenible. "No hacerlo podría funcionar para los pensionistas actuales, pero sería un lastre para los pensionistas del futuro", ha alertado.

Así que el FMI propone dividir el "lastre" entre varias generaciones. Trabajar más años. Aumentar los ingresos del sistema. Y finalmente, reserva un lugar destacado en su recetario a "animar al ahorro privado" que traducido al lenguaje coloquial significa favorecer los planes privados de pensiones. "Incluso con incentivos públicos", especifica Schaechter, que pide un sistema privado de costes bajos que incluso "pueda estar regulado por el Estado".

"Lo importante es ser transparente con la gente, que sepan durante su vida laboral cuándo se podrán jubilar y qué dinero les quedará, incluso aunque no sea un cálculo eacto porque dependerá mucho de la evolución demográfica", ha dicho Schaechter.

3. Reducir la dualidad laboral y mejorar las políticas activas de empleo

En anteriores informes, el FMI había considerado el contrato único como una solución para reducir la elevada temporalidad del país pero esta vez no lo pone negro sobre blanco. "Lo mantenemos como propuesta", ha vuelto a defender este martes el FMI, pese a que el Gobierno lo ha rechazado en múltiples ocasiones.

El organismo insiste en que España debe caminar hacia una "mejor empleabilidad y una menor dualidad laboral" para solucionar las elevadas tasas de paro juvenil, el desempleo de larga duración, la enorme temporalidad y el subempleo, cuatro cálculos en los que España ocupa el segundo lugar de la UE.

"El contrato temporal fue importante para salir de la crisis, pero España está ya en otra fase y si no ataja la temporalidad se comprometería el crecimiento económico del país a medio plazo", ha dicho Schechter.

Pero atajar la lacra de la dualidad, dice el Fondo en su informe, no puede abrir una herida en la competitividad de la economía. Así que medidas contra la temporalidad, sí... pero "manteniendo la flexibilidad en la fijación de las condiciones laborales en las empresas". Es decir, que nada de derogar la reforma laboral.

4. Aumentar la productividad y el tamaño de las empresas

Rajoy anunció recientemente medidas para aumentar el tamaño de las empresas y el FMI se une a la idea. "Elevar la productividad es un tema crítico para el crecimiento de España a medio plazo y para la reducción de  vulnerabilidades", dice el Fondo. Y especialmente en las manufacturas, el comercio y los servicios, donde el organismo observa que es más reducida que en otros países de su entorno.

"Incrementar el tamaño de las empresas", según el organismo, es uno de los métodos para elevar la competitividad. Añade otros dos: "menos regulaciones relacionadas con el tamaño" y "gastar más en I+D".

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