La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras (CC.OO.) Aragón ha manifestado que el Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno autonómico ha mejorado el número de personas dependientes atendidas esta legislatura, pero ha criticado que no quiera abordar la "precariedad laboral" que sufren los trabajadores del sector.

Así lo han señalado en rueda de prensa la secretaria general de la Federación, Delia Lizana, y la secretaria de Organización y responsable del sector privado de la misma, Montserrat Gómez, quienes han anunciado que se van a reunir este jueves, 27 de julio, por cuarta vez con la consejera del ramo, María Victoria Broto, para exponer la situación de estos trabajadores.

Lizana ha comentado que hasta ahora "no estamos teniendo una actitud muy positiva por su parte", para opinar que el Departamento "se está centrando en la atención a los dependientes, pero deja desprotegidos a los trabajadores del cuarto pilar del Estado del Bienestar".

Ha reconocido que el sector de las residencias de personas mayores que atienden a dependientes es difícil de controlar porque está "atomizado", con "muchas empresas diferentes", algunas residencias muy pequeñas y varias patronales, pero ha esgrimido que el Gobierno de Aragón tiene "responsabilidades" en este ámbito porque "está delegando la prestación del servicio" en ellas, así como en entidades sin ánimo de lucro.

La responsable sindical ha anunciado que si no se atienden sus peticiones, solicitarán reuniones con todos los grupos de las Cortes autonómicas para exponer la situación.

Lizana ha subrayado que el empleo en la atención a la dependencia está "muy feminizado" ya que el 80 por ciento de las trabajadoras son mujeres, quienes sufren "gran temporalidad" y una "alta parcialidad" de la jornada laboral, que es el 70 y 80 por ciento en vez de ser del cien por cien.

Esto hace que deban trabajar más días al año para realizar las 1.792 horas anuales de jornada que contempla en convenio del sector, un colectivo que tiene "mucha rotación, horarios abusivos, bajos salarios y sobrecarga de trabajo" y donde está presente la economía sumergida, ha detallado la responsable sindical.

POLIVALENCIA

La secretaria general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CC.OO. Aragón ha mencionado, asimismo, la polivalencia funcional de las gerocultoras, quienes deben encargarse de prestar la atención a los residentes dependientes, pero que también desarrollan otras tareas de limpieza y lavandería.

Además, ha indicado que la "falta de material" y la "sobrecarga de trabajo" lleva al "deterioro de la salud física y mental", para alertar, igualmente, del "excesivo uso del régimen sancionador" con el objetivo de despedir al trabajador "a coste cero".

Lizana también ha manifestado que existen "prácticas antisindicales" ya que en algunas residencias "se impide presentar candidaturas electorales, llegando, en algunos casos, al despido de algunos candidatos".

Por otra parte, ha manifestado que la externalización de los servicios de limpieza a centros especiales de empleo supone, en ocasiones, "un arma de doble filo" ya que "amparándose en el concepto de integración despiden a los trabajadores que prestaban el servicio como propio del centro" y las empresas reciben una bonificación social.

Lizana ha reclamado al respecto que las condiciones económicas y de trabajo de los empleados de estos centros especiales sean las mismas cuando operan en estas residencias que las del resto de trabajadores de las mismas para evitar la discriminación.

PROPUESTAS

La secretaria de Organización y responsable del sector privado de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CC.OO. Aragón, Montserrat Gómez, ha expuesto las propuestas que va a formular el sindicato al Gobierno autonómico.

Por una parte, va a reclamar un incremento "realista" del número de trabajadores a través de las ratios. En concreto, piden que haya 50 trabajadores de todas las categorías por cada cien residentes dependientes frente a los 45 actuales.

Por lo que se refiere a los gerocultores, que son quienes se encargan de la atención directa a los dependientes, piden que haya 32 por cada cien para los dependientes de grado I o moderado, 34 para los de grado II o dependientes severos y 38 trabajadores por cada cien de grado III o grandes dependientes. Actualmente, la ratio es de 27 y 28 gerocultores para los de grados II y III, ha especificado Gómez.

Para el turno noche, proponen un gerocultor presente en el centro como mínimo para los que tienen hasta 34 plazas, dos para los de hasta 68 y tres en los de 102, incrementándose a partir de esa cifra un cuidador cada 34 plazas.

Asimismo, ha abogado por que los sindicatos puedan participar en el establecimiento de los pliegos de condiciones de los contratos de gestión de las residencias con personas dependientes con el objetivo de que estos incluyan unas ratios adecuadas, estabilidad y calidad en el empleo, formación y cualificación y cumplimiento de la legislación en materia de salud laboral, igualdad y libertad sindical.

Además, quieren crear un foro que realice la vigilancia de las condiciones de trabajo, donde estén presentes los sindicatos más representativos -CC.OO. es el más votado en el sector en Aragón-, la inspección de centros y la parte empresarial.

En este punto, Gómez ha indicado que las residencias públicas, de las que hay cinco en la Comunidad, poseen un cauce de negociación a través de las juntas de personal, y las concertadas en ocasiones poseen comités, pero no hay cauce de negociación "cuando se pasa a la gestión privada" y ha recordado que hay muchas pequeñas residencias privadas repartidas por el territorio.