Así lo ha indicado a Europa Press el director general del Medio Natural y Espacios Protegidos de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Javier Madrid, quien ha visitado este viernes el área quemada junto al delegado territorial, Juan Eugenio Ortega; la alcaldesa del municipio, Esperanza Chinchilla, y técnicos de este departamento autonómico.

Con ellos, ha conocido "in situ" los trabajos de los retenes que aún permanecen en este enclave y han podido tener "una primera impresión de las medidas que hay que tomar nada más que se declare extinguido para empezar a trabajar inmediatamente".

Y es que, según ha recordado, el fuego se mantiene desde el domingo 6 de agosto en nivel de controlado, dado que hay rebrotes por las características de esta zona, "muy abrupta y de difícil acceso", y también "porque se han quemado árboles de gran diámetro", lo que "hace que tengan unas raíces y unos troncos que todavía se están quemando debajo de tierra".

"Hemos trasladado a la alcaldesa que la Consejería va a estar aquí, con el Ayuntamiento, con el municipio y que va estar, como no puede ser de otra manera, poniendo en marcha todos su equipo para proceder al proceso de restauración", ha afirmado Madrid.

En este sentido, ha explicado que en todo incendio "hay que dejar primero al monte a ver cómo reacciona", aunque "hay actuaciones, una vez se dé por extinguido, que requieren de una actuación inmediata". Ha aludido especialmente a las dirigidas a frenar "el mayor problema que hay, que es la erosión" debido a las condiciones geográficas.

Ha precisado que el área quemada presenta "mucha pendiente y una cuenca", por lo que probablemente va a haber un proceso de erosión "importante" que hay que empezar a atajar. "De ahí que vamos a pedir a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir la colaboración para elaborar una serie de diques que pueda frenar ese proceso erosivo", ha añadido.

Junto con la eliminación de árboles que están en las zonas más próximas a vías de comunicación que pueden "caerse y puede suponer un peligro para la circulación de personas", son las "actuaciones inmediatas" que se van a llevar adelante. "Son medidas que vamos a empezar a trabajar y empezaremos ya a entrar directamente al tajo en el momento en que se dé por extinguido", ha apostillado.

CONTINÚA LA INVESTIGACIÓN

El director general, por otro lado, se ha referido a la labor realizada por la Brigada de Investigación de Incendios Forestales, cuyo informe ha sido entregado a la Guardia Civil "para que continúe con el proceso de investigación porque determina claramente que ha sido intencionado" con "distintos focos de forma simultánea".

"Lo que vamos a hacer, y así lo ha manifestado además el consejero, es que nos vamos a personar en todos y cada uno de los casos en los que se determine que la causa es intencionada y en la que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado estoy seguro de que harán buen trabajo, podrán determinar quién ha sido el responsable de este incendio que ha provocado un daño tan importante", ha dicho.

Ha instado, en cualquier caso, a mantener "todas las reservas", ya que continúa la investigación, "y dejar trabajar a la Guardia Civil al objeto de que pueda determinar lo antes posible quién es el causante". Igualmente, ha preferido ser "cautos" con respecto a la superficie quemada.

El dato provisional es de 830 hectáreas, aunque la cifra puede variar "con una medición a pie de tierra" en la que se analice detenidamente un "perímetro complejo" al ser tan abrupto y por islas de vegetación sin afectar en el interior.