Pau Pérez Villán, de 34 años, es la víctima número 15 de los atentados de Cataluña, de confirmarse la línea de investigación confirmada por el conseller de Interior de la Generalitat, Joaquim Forn, que ha asegurado este lunes encontrar vinculación entre el atropello masivo, llevado a cabo por el autor material Younes Abouyaaqoub y el momento de la huida, en el que asaltó el Ford Focus de Pablo posiblemente en Universitat y emprender la huida.

Finalmente, el cuerpo de Pau fue hallado después de que su coche se saltase un control en la Diagonal, previsiblemente conducido por Younes y que habría acabado con su vida después de asestarle varias puñaladas.

Tras confirmarse esta tesis, el dueño de este turismo, Pau Pérez, de 34 años y vecino de Vilafranca del Penedès (Barcelona), pasa a ser la víctima número 15 de los terroristas, sumando los 13 de la Rambla y la persona que falleció en el atentado de Cambrils (Tarragona).

"No estaba en el asiento del conductor. No murió por impacto de bala y cobra fuerza la tesis de un testigo que vio salir huyendo del coche a otra persona. Aún no podemos vincularlo a los hechos anteriores y si el conductor de ese coche viniese del escenario del atentado de Barcelona. Si se pudiese acreditar tendríamos un cadáver más vinculado a los atentados", señaló este domingo jefe de los Mossos, Josep Lluis Trapero.

"Sé que ha corrido que es el autor del atentado en Barcelona (quien conducía el coche de la Diagonal), hay que demostrarlo. Cuando estemos en condiciones, si es el caso, lo notificaremos al juzgado. En este momento, no podemos acreditar que ese conductor viniese del atentado de Barcelona, en este momento. Cuando se pueda acreditar, tendríamos un cadáver más vinculado a los atentados", había indicado Trapero, que ahora confirma las hipótesis manejadas.

Los vecinos de Tórtoles de Esgueva coinciden en calificar a Pau Pérez Villán como "un buen chico" que, según indican, había desempeñado en los últimos años varías labores en diferentes ONGs.

Tras conocerse su fallecimiento, la localidad burgalesa celebró una misa en su recuerdo y se guardó un minuto de silencio en la Plaza Mayor del municipio.