Los campings españoles viven su mejor verano y el turismo rural... espera mejores tiempos

El verano del 2017 puede que marque cifras turísticas de récord. Pero no todos los sectores viven idéntico entusiasmo. Si miramos a los alojamientos en la naturaleza, llama la atención el contraste entre el camping y el turismo rural. Mientras el primero viven su mejor verano, el segundo espera mejores tiempos.

Según la Federación Española de Campings (FEEC), la temporada de verano que ahora se cierra ha sido la mejor de la última década para los campings, con una cifra de ocupación media nacional en torno al 85-90% y cifras similares o incluso superiores a los años precrisis. Este porcentaje se traducirá en las próximas semanas en un récord de 22 millones de pernoctaciones a lo largo del verano (julio, agosto y septiembre).

La recuperación del sector turístico nacional aparece como factor principal de este ascenso. El 65% de los campistas este verano son clientes nacionales, frente a un 35% de extranjeros, lo que significa que, poco a poco, los viajeros han vuelto a esta modalidad alojativa después de la crisis, situándola en el segundo puesto, tras el hotel, según la patronal.

Los datos que maneja apuntan a que las zonas más beneficiadas por este repunte han sido La Rioja, Navarra, Extremadura, Madrid, Aragón, Castilla-La Mancha y Castilla y León, con un 80% de campistas españoles. En Cantabria, Asturias, Euskadi o Galicia se alcanzó el 70% de nacionales, mientras que en la costa mediterránea, Murcia, Barcelona y parte de Andalucía, los turistas españoles se situaron en torno al 60%.

La FEEC celebra el descubrimiento del sector para clientes no habituales, aquellos que nunca antes habían acudido a pasar sus vacaciones en un camping. Según sus cálculos, unas 100.000 familias españolas acamparon por primera vez.

En cambio, el turismo rural español en verano ha dejado de crecer este año. Durante los meses de verano de 2017 se ha ocupado el 37% de los alojamientos rurales de nuestro país, una cifra similar al año anterior, deteniéndose la tendencia al crecimiento de años anteriores. Según datos del portal Escapada Rural, en 2016 aumentaron las reservas de alojamientos rurales un 5% respecto a 2015, mientras que este año las cifras son similares a las del año pasado.

Entre las regiones con más reservas estos meses, destacan Asturias y Navarra con un 51% de ocupación, seguidas de Cataluña (46%), Murcia y Andalucía (43%), e Islas Baleares y País Vasco (ambas con un 41%). A la cola se sitúan La Rioja (21%), Castilla-La Mancha (23%) y la Comunidad de Madrid (21%).

Respecto a provincias son aquellas que cuentan con playa las que más veraneantes acogen, siendo Málaga, con el 56%, la preferida, seguida por Barcelona, Asturias, Girona y Navarra, con un 50%. Las menos visitadas son Cuenca (16%), Guadalajara (19%) y La Rioja (21%).