Un total de 21 personas se ahogaron este verano en playas catalanas entre el 15 de junio y este lunes, ocho más que el año pasado, cuando en este periodo se habían producido 13 víctimas mortales.
Según ha informado Protección Civil, 12 murieron en playas de Girona, cuatro en Barcelona y cinco en Tarragona.
En siete casos ondeaba la bandera verde, en uno la bandera roja, en otro se pasó de la bandera amarilla a roja, otra tenía bandera amarilla y ocho no había vigilancia, y en algún caso no hay información.
Por edades, 12 fallecidos tenían más de 60 años, seis entre 30 y 60, tres eran menores de 30 años y de éstos, uno era menor de edad, con 17 años.
Respecto a los heridos graves, ha habido 16 personas rescatadas en playas catalanas y evacuadas a centros hospitalarios, cuando en el verano de 2016 hubo nueve casos.
Durante este verano, tres submarinistas han muerto mientras practicaban este deporte: dos en Illes Medes (Girona) -dos hombres de 30 y 66 años- y uno en la Platja Gran de Tossa de Mar (Girona).
En piscinas, desde el 15 de junio han fallecido nueve personas, tres de ellas menores, cuando el año pasado hubo 11 ahogados, y otras nueve han resultado heridas grave -ocho de ellas eran menores-.
Vigilancia
En Catalunya, de las 354 playas hay 126 que no están vigiladas, y de los 70 municipios de costa, 61 tienen vigilancia en las playas, según datos de Protección Civil.
La empresa Proactiva, que vigila 71 playas de 18 municipios, ha realizado este verano 200 rescates en el agua, entre el 19 de junio y el 3 de septiembre.
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