La Guardia Civil ha detenido a 51 personas en el marco de la denominada operación Tarquinal contra un organización criminal que se dedicaba al tráfico internacional de marihuana desde la provincia de Granada, habiéndose intervenido 271 kilos de esta droga, 46 vehículos de alta gama, un camión de gran tonelaje, una pistola de nueve milímetros de calibre y más de 473.000 euros en metálico.

Los detenidos, que podrían ser responsables de supuestos delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, y tenencia ilícita de armas -27 de ellos también de presunto blanqueo de capitales- conformaban una organización "perfectamente diseñada para el tráfico de marihuana a escala internacional", ha informado en rueda de prensa el subdelegado del Gobierno en Granada, Francisco Fuentes.

De los detenidos -de nacionalidad española 45 de ellos, habiendo también ciudadanos de Holanda, Francia y Polonia-, diez de ellos han ingresado en prisión.

El subdelegado ha detallado que el modo de funcionar de estas personas, que pertenecían a un mismo "clan familiar", estaba basado en tres escalones, todos los cuales han sido desarticulados en esta operación, realizada de manera conjunta con la Agencia Tributaria y que dio comienzo en septiembre de 2016.

Un primer escalón se dedicaba al cultivo de las plantaciones, mientras que un segundo escalón realizaba labores de recepción, almacenamiento, custodia y envase, y un tercero completaba las funciones para el transporte en camiones por países de Europa, principalmente Holanda, y blanqueo de capitales.

La operación, dirigida desde el Juzgado de Instrucción número 1 de Santa Fe, ha conllevado 23 registros en los municipios granadinos de Alhendín, donde estaba asentado el clan familiar, y Albolote, pero también en Málaga y Vélez Málaga.

Los cabecillas de la organización seleccionaban entre la marihuana la de mejor calidad y mayor pureza. Una vez seleccionada, la almacenaban en una nave en Moraleda de Zafayona (Granada), para el transporte principalmente a Holanda, pero también a otros países europeos. Precisamente en el domicilio del ciudadano holandés detenido y en prisión se encontraron más de 400.000 euros en metálico.

Una vez envasada y empaquetada, la droga era ocultada en camiones de gran tonelaje, como el interceptado en dicha nave, en cajas de frutas y productos de alimentación, electrodomésticos y otras máquinas. Durante la fase de explotación de la operación, y en dicha nave, se logró interceptar uno de estos camiones en el que los detenidos habían ocultado 271 kilos de marihuana entre cajas de sandías y latas de verduras.

Los beneficios obtenidos tras la venta de la droga eran blanqueados a través de una empresa de compraventa de vehículos de Málaga mediante la adquisición de vehículos de alta gama. Los que han sido intervenidos tenían un valor en el mercado superior a los 400.000 euros.

Esta organización, asimismo, matriculaba vehículos de importación después de falsificar su documentación con la finalidad de tributar por dichas operaciones "una cantidad económica muy inferior a la legalmente establecida", según ha detallado en la rueda de prensa con el subdelegado Francisco Fuentes, este martes en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada, el delegado de la Agencia Tributaria, Francisco Ruiz.

Las cuentas de los detenidos, que también utilizaban documentación de terceras personas sin su conocimiento, han sido bloqueadas, con un saldo total de 108.447 euros, mientras que el valor de sus bienes inmuebles ha sido cuantificados hasta el momento en unos 400.000 euros.

En este sentido, el teniente coronel de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada, José Santiago Martín Gómez, ha subrayado el "esfuerzo" que se está realizando en la provincia contra el tráfico de marihuana pues, con la proliferación de los cultivos, "se ha potenciado mucho por la alta rentabilidad que conlleva", habiéndose "detectado" la "implantación de organizaciones criminales" que "acaparan la venta y distribución de la droga hacia el resto de España y Europa".

Por su parte, el comandante Manuel Martín, jefe de Policía Judicial de la Comandancia, ha dado los detalles de la operación, que ha tratado de "abarcar el mayor número de personal que conformaba la organización" en sus distintos escalones, teniendo algunos de los detenidos antecedentes desde hace años.

Ha añadido que mientras que los ciudadanos polacos estaban centrados en tareas de transporte, era el holandés el que estaba al frente de la denominada "jefatura de transporte internacional".