El expresident de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, reclamó este viernes en un debate con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Ese cara a cara, al que Puigdemont dijo que "sin duda" accedería, versaría sobre el futuro político de Cataluña. El político catalán propuso realizarlo desde Bruselas.

"Creo que tiene que haber esta conversación. Necesitamos reuniones, diálogo, porque todo el mundo ha visto que lo que está ocurriendo en Cataluña no tiene nada que ver con lo que ocurre en Castilla-La Mancha o La Rioja", valoró en una entrevista concedida a la radio alemana Deutschlandfunk y recogida por Europa Press.

Puigdemont rechazó de nuevo cómo se ha aplicado el artículo 155 de la Constitución y la convocatoria de elecciones para el 21 de diciembre, sobre las que planteó que Rajoy habrá "perdido" si la correlación de fuerzas partidarias y contrarias de la independencia en el Parlament es similar a la de 2015.

"Lo has intentado todo y no sólo no has solucionado el problema, sino que lo has empeorado", le reprochó Puigdemont al número uno del Ejecutivo español. El expresident reiteró que no tiene intención de pedir asilo a Bélgica por su situación judicial.

Preguntado sobre si aceptaría un sistema financiero como el de Navarra y Euskadi para Cataluña, replicó que sería interesante pero poco probable la proposición, porque el Estatut de 2006 ya fue "tumbado". "Si el Gobierno español hace esta proposición, garantizo que la escucharemos, pero no hay nada sobre la mesa".

Además, Puigdemont admitió que los catalanes no tienen capacidad de reformar la Constitución en solitario, porque representan una minoría de 47 diputados en el Congreso de los Diputados, donde hay 350 escaños.

Finalmente, criticó el discurso que el rey Felipe VI ofreció tras el 1 de octubre y el denominado paro de país del día 3, porque "específicamente excluyó" dirigirse a los independentistas. "¿Abdicó el rey español de rey de todos los catalanes? Porque no habló a los sujetos separatistas", se preguntó.

Puigdemont rechazó hablar de división en la sociedad porque existan diferentes sensibilidades sobre la independencia. "Es normal que haya catalanes que quieran la independencia y otros que no. Pero, ¿en qué está de acuerdo la gran mayoría? Sobre esto queremos votar", zanjó.

El portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo, ha asegurado este viernes que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont con quien tiene que debatir es con el candidato del PP a la Presidencia de la Generalitat, Xavier García Albiol, no con el presidente del Gobierno. Es más, ha dicho que en ese debate debería explicar los pasos que ha dado para llevar a Cataluña a una "pérdida de prestigio y reputación".

"Creo que Puigdemont con quien debe debatir es con el señor García Albiol, que es con quien se va a enfrentar en las urnas en las elecciones al Parlamento de Cataluña", ha manifestado Méndez de Vigo en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros que se ha celebrado en el Palacio de la Moncloa.

El portavoz del Ejecutivo ha señalado que lo que tiene que hacer Puigdemont es debatir con los que se va a "enfrentar directamente" en las elecciones, en vez de "pretender evitar el debate", que es, a su juicio, lo que está haciendo "siempre". Es más, ha dicho que desde que "evitó a la Justicia en España refugiándose en Bélgica", se está dedicando a "echar balones fuera para no debatir con quien en realidad tiene que debatir".

Precisamente, el candidato del PP ha propuesto un debate cara a cara en los próximos días con Puigdemont, asegurando que incluso estaba dispuesto a ir a Bruselas para celebrarlo. Albiol incluso ha enviado una carta a la directora de la campaña de JuntsxCat, trasladándole la invitación y argumentando que los "catalanes tienen derecho a saber la verdad".

En esta misma línea se ha expresado Méndez de Vigo al afirmar que ese debate entre Albiol y Puigdemont puede servir para explicar qué defiende cada uno. Y el expresidente catalán, ha proseguido, tiene que "explicar cuáles son todas las acciones que han llevado a Cataluña a esa pérdida de prestigio y de reputación a través de una política secesionista".

Ante la posibilidad de que ERC y PDeCAT estén sopesando la posibilidad de abandonar la vía unilateral en sus programas electorales, Méndez de Vigo ha dicho que a Ejecutivo no le corresponde "juzgar sobre los programas o las declaraciones de los grupos políticos".

"Estamos viendo declaraciones en uno y otro sentido que revelan sobre todo un gran desconcierto y una notable improvisación. Aquellos que durante meses han contado durante meses que la proclamación de la república catalana era algo que se había con total naturalidad, que era la Arcadia feliz y que no iba a haber más que beneficios, se han dado de bruces con la realidad", ha enfatizado.

De la misma manera, Méndez de Vigo ha señalado que las formaciones independentistas han visto como sus tesis no tenían apoyo internacional y por eso están viendo que hay "muchas voces" que son "críticas" y hacen "autocríticas".

Por todo ello, ha defendido la necesidad de que, ante las elecciones del 21 de diciembre, los catalanes analicen lo que ha pasado en los últimos años y vean si el proceso secesionista "ha traído algún beneficio para los catalanes". "Que piensen en eso a la hora de votar en quién les estaba engañando todo este tiempo", ha concluido.