En su intervención, López ha hecho hincapié en la utilidad que tienen los Equipos de Orientación Educativa en los centros educativos "para el desarrollo del currículo de los alumnos con algún tipo de discapacidad o trastorno", así como en la necesidad de estas jornadas especializadas para la formación del profesorado, "que ayudan a que la educación sea de calidad para todos".

Por su parte, la directora general de Participación y Equidad, María Isabel González, ha manifestado su inquietud por dar respuesta a las necesidades educativas de todos los alumnos y alumnas y ha destacado como pieza esencial los Equipos de Orientación Educativa Especializados, a los que ha reconocido su labor.

A lo largo de la mañana, en la jornada de formación se han tratado diversos temas de interés como las responsabilidades legales y otros aspectos jurídicos relacionados con la Orientación Educativa, ponencia a cargo de María del Carmen Castillo, del Servicio de Inspección de la Delegación Territorial de Almería, así como las competencias emocionales en los profesionales de los Equipos de Orientación Educativa Especializados por parte del 'coach' Alberto Ortega.

En la sesión de tarde la atención ha estado puesta en los contenidos por especialidades. Respecto a la Atención Temprana Rocío Carrasco, del centro de Atención infantil Temprana San Juan de Dios, ha tratado la gestión del aula con alumnado de Educación Infantil con Trastorno del Desarrollo, y sobre el Trastorno del Espectro Autista (TEA), Daniel López, de Autismo Sevilla, ha reflexionado sobre la ansiedad y problemas de conducta en el TEA.

Por otro lado, sobre las altas capacidades ha sido César Arellano, del Centro Renzulli, quien ha señalado estrategias de intervención para el centro y el aula con alumnado de Altas Capacidades; sobre las discapacidades físicas y auditivas han tratado Juan Francisco Mancera,

de Aspromin Huelva, y Juana Navarro y Manuel Algarra, del Centro de Educación Especial Rosa Relaño; por último, Cosette Franco y Antonio Reina, de Mentoris, han señalado los pilares de la intervención educativa para el Trastorno general de conducta.