En rueda de prensa, en la que ha estado acompañado por la edil Marina Blanco, Peña ha considerado que se está dando "dejación absoluta de funciones por parte del equipo de Gobierno en la gestión de esta Feria de Navidad", que está siendo desarrollada por la empresa Organización de Congresos y Exposiciones.

En este sentido, ha desvelado que, mientras la firma, por la ocupación del espacio público correspondiente de la Plaza del Mercado, paga un canon de 800 euros, "la firma está cobrando a cada uno de los puestos instalados 1.500 euros". Como hay 36 puestos, "los ingresos para la empresa podrían estar en torno a los 54.000 euros".

"Están ocupando uno de los mejores espacios públicos de la ciudad, y la empresa está marcando a su libre albedrío los precios para los participantes, sin ningún control municipal. El Ayuntamiento no debería permitir esto, debería fijar unos precios porque, con lo que se está cobrando, se está impidiendo acceder a algunos comercios", ha dicho.

Para Marina Blanco, el mercadillo "no debe ser una actividad para ganar dinero, sino que debería aprovechar la oportunidad para marcar la línea que queremos para el comercio". En esta línea, ha apuntado que "las únicas condiciones para instalarse en el mercado son vender o alimentación, o adornos o regalos".

Tres tipos de productos "con los que se hace competencia directa a los establecimientos del entorno". Frente a esta situación, Blanco ha apostado porque "este tipo de mercados sirva para otro tipo de actividades", entre las que ha citado "pequeños comerciantes que no pueden establecerse en locales, artesanos, artistas, diseñadores de la ESDIR, pequeños productores o gente que trabaje con las DOC riojanas".

"Lo que queremos -ha puntualizado- es un comercio de cercanía, sostenible, accesible, igualitario, para productos manuales, fresco y novedoso, que no sea lo de siempre. Que se utilicen los espacios públicos para fomentar este tipo de comercio".

En palabras de Gonzalo Peña, "pensamos que existe un planteamiento profundamente erróneo de la ocupación del espacio público" con este mercadillo, con el que, como ha insistido, "hay una tremenda dejación de funciones en su supervisión por parte de la concejal encargada, Pilar Montes".

Por ello, ha reclmado que, de cara a este año -la concesión se prolongará hasta el 7 de enero- "se haga una fiscalización" de la gestión del mercado de Navidad, y que, para próximas ediciones, "el Ayuntamiento se haga cargo de la gestión de forma directa".