20 años de la muerte de Ana Orantes

El testimonio de Ana Orantes dejó a España sin respiración. Rompió el silencio y lo pagó con su vida. Su exmarido la quemó viva dos semanas después de denunciar las agresiones machistas sufridas durante 40 años. Su asesino tenía fácil acceso a ella: un juez la obligaba a compartir vivienda con él. Ana lo había denunciado varias veces, pero la sociedad y la justicia le dieron la espalda. El verdugo fue condenado a 17 años de prisión. El asesinato de Ana Orantes marcó un antes y un después, destapó la lacra de la violencia machista y activó la maquinaria judicial, aunque no paró los asesinatos. Este domingo, su familia le ha rendido homenaje con una misa en el 20 aniversario de su muerte.