Pitos al himno en la final de Copa del Rey, la polémica de todos los años

Momento de la pitada al himno en la final de Copa.
Momento de la pitada al himno en la final de Copa.
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Momento de la pitada al himno en la final de Copa.

Se ha convertido en una tradición cada vez que el Barcelona se clasifica para la final de la Copa del Rey, especialmente en los últimos años. Cada vez que el equipo culé ha llegado al último partido del torneo del KO, vuelve el mismo debate y la misma polémica: los pitos al himno de España.

No ha sido así siempre. De las 40 veces que se ha clasificado para este partido el Barcelona (que también es el que más títulos tiene, 29), ha sido en los últimos años cuando ha repuntado este fenómeno, ya convertido en un debate nacional cada vez que llega dicho duelo y que trasciende con mucho el propio fútbol.

Las posiciones son directamente encontradas: los hay que afirman que pitar al himno es un derecho dentro de la libertad de expresión, y los hay que lo ven un insulto y una falta de respeto, máxime cuando está Su Majestad en el palco. También hay posiciones más tibias, como la del ex alcalde de Barcelona Xavier Trias, que pide tener sentido del humor y no tomárselo tan en serio.

El último precedente de una final entre Barcelona y Sevilla fue en 2016, en el estadio del Atlético también que entonces era el Vicente Calderón: la mitad mayoritariamente barcelonista del estadio pitó el himno, la otra mitad mayoritariamente sevillista lo aplaudió o tarareó. En 2017, que jugaron los blaugrana contra el Alavés, también se pitó el himno. Pero fue en la de 2015, la que enfrentó a Barcelona y Athletic en el Camp Nou, donde el Rey Felipe escuchó una de las mayores pitadas al himno de los últimos tiempos.

Amarillo contra rojo

Hay muchos aficionados del Barcelona que creen en el independentismo, sean catalanes o no. Por eso, varias peñas blaugrana han pedido a la afición que tiña el Wanda Metropolitano de amarillo. Camisetas amarillas, bufandas, globos... Todo para que el color con el que se ha identificado el movimiento político a favor de la escisión de Catalunya se vea de manera notoria.

Pero no todo el barcelonismo es independentista. Aunque el presidente culé se posicione y pida "respeto por el derecho a decidir de los pueblos", se espera que el estadio rojiblanco también cuente con numerosos aficionados ajenos al movimiento político que apoya el club catalán. De hecho, las peñas barcelonistas de Sevilla quieren contrarrestar el amarillo con globos rojos para que se forme una bandera de España. Pero más allá de que haya actuaciones a favor o en contra, reivindicaciones o pitos, hay voces que piden al gobierno que actúe al respecto. José Ramón Lete, presidente del Consejo Superior de Deportes, ya ha avanzado que no van a tomar ninguna medida a priori, pero que "si se vulnera la normativa de la ley antiviolencia, se actuará como se hace normalmente".

La posición de TVE también será vigilada de cerca. En 2009 recibieron numerosas críticas cuando no emitieron el himno en directo, lo que muchos interpretaron como un intento de silenciar los posibles pitos (como efectivamente hubo) en la final que enfrentó al Barcelona y al Athletic Club en Mestalla. En lugar de pinchar el momento que tanta polémica levantó, conectaron con la afición de Bilbao. Una hora después, durante el descanso, Juan Carlos Rivero, el narrador, anunció que "por un error humano" no se ofreció la llegada del Rey Felipe al palco y la interpretación del himno. La diferencia entre cómo se escuchó el himno emitido en este momento y cómo se coló al principio el sonido de los pitos es notable.

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