Muestran cómo Rubens, maestro del movimiento y la sensualidad, influyó durante 300 años

  • 'Rubens y su legado', en la Royal Academy de Londres, presenta al maestro del barroco como un creador expansivo cuya huella llegó hasta el siglo X.
  • La exposición, una de las grandes citas artísticas de 2015, agrupa 160 obras del pintor flamenco y de los muchos sucesores que tomaron nota de sus hallazgos.
  • Entre los pintores 'tocados' por el vívido y cinético estilo de Rubens están Van Dyck, Watteau, Turner, Delacroix, Manet, Cézanne, Renoir, Klimt y Picasso.
Uno de los feroces y dinámicos cuadros de caza de Rubens
Uno de los feroces y dinámicos cuadros de caza de Rubens
Rennes, Musée des Beaux Arts. Photo © MBA, Rennes, Dist. RMN-Grand Palais / Adélaïde Beaudoin
Uno de los feroces y dinámicos cuadros de caza de Rubens

Nadie había mostrado en las artes plásticas el movimiento con tanto frenesí y belleza cinética antes de que Pedro Pablo Rubens (1577-1640) pintase, en torno a 1616, sus cuadros de caza. En The Tiger, Leopard and Lion Hunt (La caza del tigre, el leopardo y el león) y en The Hippopotamus and Crocodile Hunt (La caza del hipopótamo y el cocodrilo), el maestro flamenco, artista mimado de la corte española de Felipe IV, el llamado Rey Planeta,  pintó las escenas de cetrería a caballo con tal violenta ferocidad y un uso dramático tan novedoso de la composición basada en diagonales —para llevar la mirada del observador en espiral desde el exterior al interior central de la escenas— que el público de la época se sintió anonadado e incluso algunas personas se mareban al contemplar los cuadros.

Pero el influjo de Rubens —tal vez el primer pintor realmente ilustrado de la historia (hablaba a la perfección alemán, neerlandés, francés, italiano, español y latín y se carteaba con intelectuales y creadores de toda Europa)— no se quedó en su poder para capturar el movimiento. También elevó a niveles nuevos la sensualidad Venus at a Mirror, 1615, y Pan and Syrinx, 1617, son de una temperatura erótica desconocida en la época— y durante su vida se hablaba de un tipo de mujer rubenesca, plenamente carnal, voluptuosa y de sexualidad nada tamizada por la estética clásica a la que el pintor, no obstante, admiraba, sobre todo a Leonardo, Miguel Ángel y Tiziano.

Poético, sublime, vivaz...

Poético, sublime, vivaz, de técnica perfecta y dotado para la iluminación del color de una capacidad que todavía es señalada como proverbial, el influjo de Rubens puede seguirse en la línea del tiempo del arte durante 300 años, hasta el siglo XX. Entre los pintores tocados por la poética de Rubens aparecen Van Dyck, Watteau, Turner, Constable, Delacroix, Manet, Cézanne, Renoir, Klimt y Picasso.

Una de las grandes citas artísticas del año analiza el largo y todavía vivo influjo del explosivo y vertiginoso Rubens en decenas de grandes pintores que siguieron su senda. Rubens and His Legacy: Van Dyck to Cézanne (Rubens y su legado: de Van Dyck a Cézanne), del 24 de enero al 10 de abril en la Royal Academy of Arts de Londres, agrupo 160 pinturas y dibujos del pintor flamenco y aquellos de sus sucesores en los que resulta más palpable la huella del gran maestro.

Pese que Rubens es recordado por sus "carnosas y sensuales" mujeres, la muestra quiere ilustrar la "amplitud" y los "logros todavía presentes" en términos de "lenguaje visual, composición, temas y estilos", de un artista "cuya resonancia ha continuado a lo largo de los siglos".

'Enorme versatilidad'

Como obvia segunda intención, los organizadores desean volver a insistir en el "vívido realismo" y la "rica pincelada" del creador y la "enorme versatilidad" que le llevó a "abarcar todos los géneros de la pintura": desde retablos religiosos y retratos familiares, hasta paisajes, escenas históricas y creaciones de tema mitológico.

La exposición, dividida seis áreas que remiten a cada una de las características de la obra asombrosa de uno de los más grandes pintores de la historia —poesía, elegancia, poder, deseo, compasión y violencia—, vincularán cada particularidad con la forma en que se proyectó la enseñanza de Rubens en las generaciones posteriores, desde Van Dyck —que fue durante una temporada asistente del flamenco— a Watteau en el siglo XVII; Delacroix, Constable, Manet y Daumier en el XVIII,  hasta Cézanne y Picasso en el XX.

La 'bañistas' de Cézanne frente a una Venus de Rubens

Con la estructura basada en el yuxtaposición, la Rubens and His Legacy es posible comparar la huella poética de The Garden of Love (El jardín del amor, pintado por el flamenco en torno a 1633) con obras románticas de Gainsborough, o la Venus Frigida (1614) del primero con Three Bathers (Tres bañistas, 1875) de Cézanne.

El coordinador de la exposición, Nico Van Hout, dice: "Sólo los mejores artistas fueron capaces de traducir el lenguaje visual de Rubens a un lenguaje personal y estamos encantados de reunir una rica selección de ese tipo obras para mostrar la actual fortaleza del legado de Rubens en los últimos tres siglos".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento