Seis activistas de Ofelia Nieto siguen en el calabozo y los vecinos planean tomar el solar

  • Cinco de los detenidos durante las protestas por el derribo de la casa de los Gracia-González han sido liberados | Están acusados de resistencia y desobediencia.
  • La asamblea vecinal vota este miércoles la posible ocupación del solar para impedir que el Ayuntamiento de Madrid se lo ceda a una constructora.
  • La familia expropiada se refugia en casa de una vecina y se niega a recoger los 399.000 euros que le corresponden como indemnización.
Agentes de Policía Municipal intentan desalojar la excavadora a la que se subieron los activistas del barrio de Tetuán para evitar el derribo de la casa de la calle de Ofelia Nieto, 29.
Agentes de Policía Municipal intentan desalojar la excavadora a la que se subieron los activistas del barrio de Tetuán para evitar el derribo de la casa de la calle de Ofelia Nieto, 29.
Javier Lizón / EFE
Agentes de Policía Municipal intentan desalojar la excavadora a la que se subieron los activistas del barrio de Tetuán para evitar el derribo de la casa de la calle de Ofelia Nieto, 29.

Seis activistas de distintos colectivos detenidos el pasado viernes, 27 de febrero, durante el derribo de la casa de los Gracia-González en la calle Ofelia Nieto continúan en los calabozos a la espera de pasar a disposición judicial. Mientras tanto, los vecinos se organizan para dar un nuevo uso al solar e impedir que el Ayuntamiento de Madrid se lo ceda a la constructora que concluirá el plan de reforma del barrio.

Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid, detalló este martes que el número detenidos entre el grupo que intentó impedir el desalojo de esta familia del barrio de Tetuán ascendió a 11. Cinco de ellos han sido puestos en libertad bajo cargos de desobediencia y resistencia. Los otros seis están acusados de atentado a la autoridad, por lo que permanecerán encerrados hasta pasar a disposición judicial.

Cifuentes también aclaró que el desahucio de los diez miembros de la familia fue ejecutado por la Policía Municipal de Madrid en base a la orden del juzgado de lo Contencioso Administrativo nº28, y no por la Policía Nacional. La delegada se negó a valorar la actuación de los agentes locales por estar fuera de su competencia.

"Intentan rehacer su vida"

Tras la demolición del que fue su hogar durante 20 años, los Gracia-González se refugian ahora en casa de una vecina del barrio, según fuentes próximas.

"Intentan rehacer su vida poco a poco. Han sufrido un golpe muy duro y se han visto en todos los medios de comunicación. Imagina lo que le pasa por la cabeza a Francisco y Luisa (los cabezas de familia), que mantuvieron esa casa con sus manos", explica un portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). "Necesitan descansar. Incluso nosotros les hemos dejado espacio", añade un miembro del grupo de apoyo que les ha servido de soporte en el barrio.

La familia se niega, por el momento, a recoger los 399.123 euros que el Ayuntamiento de Madrid ha consignado como indemnización por la expropiación y a aceptar la vivienda de alquiler con opción a compra que se les ha ofrecido. "Ya tenemos nuestra casa pagada", han repetido.

Según su entorno, aún esperan la decisión de los tribunales, pero el Consistorio considera que no hay nada que hacer, ya que varios jueces han dado la razón al Ayuntamiento: "En el año 2009 solicitaron la retasación del inmueble, que el Jurado Territorial de Expropiación Forzosa ha fijado en valoración de 399.123 euros. La solicitud de exclusión total o parcial de la finca de la expropiación ha sido desestimada en vía administrativa y judicial [por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y el Supremo]".

Las autoridades municipales tampoco se plantean cambiar el planeamiento de la zona ni permitir la reconstrucción de Ofelia Nieto 29, como reclaman los activistas contrarios al desahucio. Este miércoles, la asamblea de apoyo celebrará un encuentro en un centro social del barrio donde se votará la posible ocupación del solar, a fin de evitar que el Ayuntamiento se lo otorgue a la constructora Ortiz, que levantará en él un bloque de pisos a cambio de completar el lavado de cara del ámbito, de 17.450 metros cuadrados.

"La idea es tomar el recinto. Después de la reconstrucción simbólica, proponemos limpiarlo y realizar actividades para conservar la memoria de lo sucedido. No queremos que especulen con él, pero eso lo decidiremos entre todos", detalló un miembro del colectivo.

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