Los responsables de Antena 3 admiten que están "en las nubes". Su nueva serie Allí abajo se convirtió el martes en el mejor debut de ficción de la televisión de los últimos diez años al registrar más de 5.350.000 espectadores (27,3% de cuota de pantalla). Un dato "estratosférico, casi un milagro en una parrilla tan segmentada como la actual", explican desde la cadena. Aún así, prefieren ser cautelosos ("hay que esperar a ver cómo funcionan los próximos capítulos").

Es pronto para dar una valoración, pero la directora de Ficción de la cadena, Sonia Martínez, avanza que una de las claves de Allí abajo es su humor regional que ahonda en los choques culturales entre el norte y el sur y que lleva los tópicos a la exageración. Una línea que ya ha demostrado su eficacia en producciones cinematográficas como Bienvenidos al norte, Bienvenidos al sur u Ocho apellidos vascos, la película española más taquillera de la historia. Y que en el caso de Allí abajo, ha obtenido sus mejores resultados entre la audiencia del País Vasco (46,3% de cuota de pantalla) y de Andalucía (39,4%), las dos comunidades que están representadas en la trama.

"Se trata de un humor basado en clichés y en diferentes formas de enfrentarse a la vida. Muchos televidentes se identifican con ellos y otros, los reconocen. Nos permite reírnos de nosotros mismos desde lo positivo. Eso funciona en todo el mundo", observa antes de enumerar otros ingredientes. Entre estos, el casting, que combina rostros consolidados con otros menos conocidos en el ámbito televisivo ("el espectador agradece la mezcla y descubrir nuevos talentos"), unos guiones bien elaborados (entre sus responsables, el experto del género Óscar Terol, de Vaya semanita) y una producción más cuidada que en otras comedias y que incluye numerosos exteriores.

Pero hay otros factores externos y de "oportunidad". Por ejemplo, el hecho de que la visita de Isabel Preysler a El hormiguero, el espacio que precedía a la serie en la programación, atrajera a millones de telespectadores hacia la cadena poco antes de que esta comenzara. "El efecto arrastre fue beneficioso aunque también hubo un feed back: algunas personas se acercaron a El Hormiguero para esperar el comienzo de la ficción", matiza Martínez.

Asimismo, los usuarios dejaron en Twitter sus valoraciones de la ficción. En general, los tuiteros la calificaron de "simpática" y "entretenida", y aplaudieron su tono, su factura ("casi cinematográfica"), sus gags y la brillante actuación de María León. En el otro extremo, algunos echaron en falta "más ritmo",  la tildaron de "demasiado exagerada" o simplemente la consideraron "correcta".

El reto con el que tendrá que enfrentarse el próximo martes Allí abajo no será, sin embargo, sencillo. Mantener los brillantes datos de su estreno, una vez pasado el efecto novedad, constituye una ardua tarea.

La situación podría complicarse aún más si Telecinco decide mover ficha con el fin de restar audiencia a su enemigo natural. La cadena de Mediaset guarda en el cajón dos series de éxito probado —El Príncipe y La que se avecina—, que podría utilizar para contrarrestar la fuerza de la ficción protagonizada por María León. Esto provocaría la retirada o traslado de la actual Aquí paz y después gloria. La serie protagonizada por Antonio Resines se desinfló ante el empuje del resto de cadenas.

Allí abajo no es la única serie que en la última década ha logrado el hito de rebasar los cinco millones de espectadores en su estreno en una parrilla muy diversificada. Curiosamente, todas las que conforman este ranking excepto una (Los pilares de la tierra) son de factura española.

En febrero de 2014, el debut de El Príncipe (Telecinco) registró 5.654.000 televidentes (27,7% de share) gracias a un estreno multicanal (la serie se emitió simultáneamente en media docena de los canales del grupo Mediaset). En 2013, el primer episodio de El tiempo entre costuras (Antena 3) fue seguido por 5.018.000 (25,5%); Los Pilares de la tierra (5.102.000, 31,5%) dieron en 2010 a Cuatro su mejor dato de audiencia de la historia y Águila Roja se convirtió, en febrero de 2009, en el mejor estreno de una serie nacional en televisión desde 2005 con 5.013.000 espectadores (26,4% de cuota de pantalla).

La mejor nota, sin embargo, la ostenta Aída, que arrancó su andadura en 2006 ante la mirada de 6,8 millones de personas (36%).