La auxiliar de enfermería Teresa Romero se incorporará este jueves a su puesto como auxiliar de enfermería en el Hospital Carlos III-La Paz tras diecisiete meses de baja desde que se contagió del ébola, enfermedad que superó con éxito tras una larga lucha.

Fuentes cercanas a la familia han señalado que la incorporación tendrá lugar después de que su médico de cabecera le diera el alta este miércoles al estar en condiciones para volver a su trabajo. Hasta su contagio, trabajaba atendiendo casos de infecciones de VIH, hepatitis o tuberculosis, entre otras afecciones.

En octubre de 2014, la auxiliar se convirtió en la primera española contagiada por el virus. Fue el primer caso de contagio de ébola fuera de África occidental al atender al misionero Manuel García Viejo, que fallecería a causa de la enfermedad el 25 de septiembre de 2014.

Este miércoles, la sanitaria acudió a los tribunales en la causa en la que la juez de Instrucción número 21 de Madrid investiga las supuestas negligencias cometidas al no haberse adoptado las medidas necesarias para evitar el contagio.

En su declaración, Romero señaló a la juez que no recibió formación específica para evitar contagios. Tan sólo asistió a algunas charlas informativas y a un taller de una hora en el que se les mostraban cómo ponerse el traje

La denuncia que dio origen al procedimiento fue presentada por 15 médicos del Servicio de Medicina Intensiva del Hospital Carlos III. Tras abrirse diligencias de investigación en octubre de 2014, se sumaron al procedimiento otras denuncias de CSIF y del Sindicato de Auxiliares de Enfermería. También lo hizo el despacho Garzón Abogados, que representa a Romero.

La testifical de Teresa Romero es la primera declaración que se toma en la causa. Hasta ahora la magistrada se había limitado a solicitar documentación acreditativa de las medidas que se adoptaron en el hospital madrileño.