El rey ha iniciado este lunes su tercera ronda de consultas con los partidos políticos, que concluirá en la tarde del martes y está encaminada a dilucidar si no hay más remedio que convocar nuevas  elecciones en junio ante la falta de acuerdo entre las fuerzas para formar Gobierno. Así, Felipe VI recibe desde las 10 de la mañana en el Palacio de la Zarzuela a los líderes de ocho formaciones políticas minoritarias, en tanto que este martes continuará con los representantes de los partidos de más representación parlamentaria. Al igual que en las dos rondas anteriores, no acudirán ni ERC ni EH Bildu, que no han querido reunirse con el monarca.

Uno a uno, los distintos partidos que han acudido este lunes a Zarzuela han ido marcando al rey el camino a las nuevas elecciones, que la mayoría consideran inevitables dadas las dificultades para llegar a un acuerdo en 24 horas.

El diputado de Nueva Canarias Pedro Quevedo ha sido el primer representante político con el que el jefe del Estado se ha reunido en su despacho oficial de Zarzuela. Según Quevedo, que ha vuelto a transmitir a Felipe VI su intención de apoyar al líder de los socialistas, Pedro Sánchez, el monarca está "decidido a indagar la posibilidad de un acuerdo de Gobierno hasta el último momento", aunque no ha descartado que tuvieran que volver a verse en una nueva ronda de contactos más adelante, que se celebraría ya después de la celebración de nuevas elecciones.

Quevedo ha querido mostrarse optimista y ha insistido en que "hasta el último minuto hay partido". "No renunciamos a que pueda haber un acuerdo en el último segundo", ha dicho. Si finalmente hay comicios, Quevedo ha afirmado que el "escenario es favorable" para que su partido vuelva a concurrir en coalición con el PSOE.

El siguiente en reunirse con el rey ha sido Isidro Martínez Oblanca, de Foro Asturias, que concurrió el 20-D en coalición con el PP. Martínez Oblanca ha sido más pesimista, y tras su encuentro con Felipe VI ha dicho claramente que nos encaminamos "hacia nuevas elecciones". En ese contexto, ha reconocido que el rey ha manifestado que espera que los partidos "no cansen a los ciudadanos con una campaña gravosa para la economía del país".

También pesimista se ha mostrado Ana Oramas, de Coalición Canarias, que ha afirmado que "no hay ninguna posibilidad en las próximas horas" de un acuerdo que evite las elecciones. Sobre estas, que considera inevitables, Oramas las concibe como "una segunda vuelta" tras la cual "volverá a haber necesidad de diálogo, acuerdo y consenso".

A continuación ha sido el turno de Javier Esparza, de UPN, que tras la reunión ha señalado que no cree que el rey vaya a proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno 'in extremis' si no tiene la "certeza" de que éste vaya a tener "un final feliz". En todo caso, ha remarcado que "todo es posible hasta el último minuto". En la misma línea que Foro Asturias, Esparza ha contado que Felipe VI ha valorado "muy positivamente" la propuesta que UPN hizo llegar al presidente del Congreso, Patxi López, el pasado 13 de abril en una carta, en la que plantearon recortar al menos un 30% el gasto electoral en caso de repetición de los comicios, lo que supondría un ahorro de 45 millones de euros.

Ya por la tarde, el rey se ha entrevistado con Alberto Garzón, de IU-Unidad Popular, que ha dicho que, si no hay candidato, el mismo miércoles próximo se puede dar por iniciada la campaña electoral. El portavoz de IU ha hablado con Felipe VI de las posibilidades de confluencia de su formación con Podemos, sobre la que se ha mostrado optimista, aunque ha reconocido que hay dificultades que superar.

Los siguientes serán Aitor Esteban, del PNV; Alexandra Fernández, de En Marea, y Francesc Homs, de Democràcia i Llibertat.

Será la tercera ronda de consultas que emprende el rey desde que se constituyeron las Cortes de la XI Legislaturapara tratar de encontrar un candidato a la Presidencia del Gobierno. En esta ocasión, las consultas se harán en un formato exprés, en lugar de ocupar toda una semana en la agenda del monarca, como ocurrió con las dos rondas que han tenido lugar desde las elecciones del 20 de diciembre.

La ronda proseguirá el martes a partir de las 10.00 horas con el diputado de Compromís Joan Baldoví; el representante de En Comú-Podem Xavier Domènech (11.00 horas); y los líderes de Ciudadanos, Albert Rivera (12.00 horas) y Podemos, Pablo Iglesias (13.00 horas). El rey ha dejado para la tarde del martes a los líderes de los dos principales partidos. Recibirá al socialista Pedro Sánchez, a las 16.30 horas, y a las 17.30 horas, al presidente del PP, Mariano Rajoy.

Una vez concluya la audiencia con Rajoy, en la misma tarde de ese martes se comunicará a la opinión pública el resultado de esas consultas, ha confirmado un portavoz de la Casa del Rey.

El monarca anunció de manera sorpresiva el pasado 12 de abril esta tercera ronda de consultas con los partidos para constatar si, como parece evidente, hay que convocar elecciones de nuevo ante la falta de acuerdos para formar Gobierno o, por el contrario, existe un candidato con garantías de ser investido presidente del Gobierno.

Felipe VI dejó claro cuando convocó la ronda que solo nominaría un candidato a la investidura que tuviese garantizados los apoyos suficientes para superar con éxito la votación. A día de hoy, no hay indicios de que pueda alcanzarse un pacto para formar Gobierno, a juzgar por las últimas declaraciones de las formaciones políticas. De manera que si no hay cambios el próximo 3 de mayo se disolverían las Cortes y se convocarían nuevas elecciones para el 26 de junio.

Desde la restitución de la democracia española, será la primera vez que el Rey decide disolver las Cortes y convocar elecciones ya que, en condiciones normales, ésta es una competencia del jefe del Ejecutivo.

El líder del PP, Mariano Rajoy, declinó presentarse a la investidura al término de la primera serie de entrevistas. Tras la segunda ronda, también de cinco días, don Felipe propuso al líder socialista, Pedro Sánchez, pero su investidura fue fallida.

Si de estas reuniones no surge, como todo indica, un candidato con posibilidades de superar la investidura, el jefe del Estado, de acuerdo con el artículo 99 de la Constitución, convocará nuevas elecciones, pero no podrá hacerlo hasta que no se cumpla el plazo marcado por la Carta Magna, que vence el próximo 2 de mayo.