Un equipo de fieles que representen el proyecto político que ha vencido en las primarias y no repetir los errores del pasado. Esas son dos de las principales ideas que, según fuentes de su entorno, tiene en la cabeza el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, a la hora de formar sus equipos y su Ejecutiva Federal, que será designada en el 39º Congreso que el partido celebrará del 16 al 18 de junio. Y en ella, en aras de la integración y por considerar que ambos "siempre han coincidido en lo estratégico", según su entorno, le ha ofrecido a Patxi López un puesto clave en la nueva dirección.

El ofrecimiento tuvo lugar la semana pasada en un encuentro privado en Madrid, según adelantó este lunes la Ser y confirmó 20minutos. Un puesto "potente", pensado en clave "territorial" y "federal", dada la experiencia de López en Euskadi como lehendakari, de cara sobre todo a la crisis creciente en Cataluña. La cita entre ambos, la primera tras la campaña de primarias, fue cordial, pero Lopez, que dijo que se lo pensaría, aún no ha dado una respuesta y mantiene un silencio total, él y su entorno.

"No tengo intención de estar en la Ejecutiva de Susana Díaz o Pedro Sánchez", decía el exlehendakari 48 horas antes de las primarias del pasado 21 de mayo, en las que obtuvo casi el 10% de los votos frente al más del 50% de Sánchez y el casi 40% de Díaz.

Durante la campaña, Sánchez invitó a la candidatura del exlehendakari a sumar fuerzas contra Susana Díaz e incorporó en su programa varias de sus propuestas políticas, como implantar el sistema de doble vuelta en las primarias. Entonces, la respuesta de López fue negativa, y días después, en declaraciones previas a la votación interna, insistía en que no buscaba un "acomodo personal", sino evitar que tras las primarias se mantuviesen grupos como oposición interna a la dirección electa, como pasó tras el congreso de Sevilla en el que Alfredo Pérez Rubalcaba por la mínima a Carme Chacón.

Para evitarlo, el diputado vasco abogaba por integrar a las tres corrientes que confrontaron por el liderazgo del PSOE. Sin embargo, hay una cosa que, Pedro Sánchez y su equipo tienen claro: no repetir los errores del pasado. Y entre ellos, afirman algunos de sus colaboradores, está el de no volver a conformar una Ejecutiva centrada en los contrapesos territoriales, sin mayoría propia, y en la que un futuro pudiera repetirse una maniobra como la que el pasado mes de octubre acabó con Sánchez fuera de la secretaria general. Es decir, que se produzca la dimisión de la mitad más uno de la Ejecutiva para forzar la marcha del líder.

El entorno de Sánchez considera que éste, a diferencia de 2014, cuando se impuso a Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias con la ayuda de buena parte del aparato, especialmente de la federación andaluza de Susana Díaz, ahora ha vencido con la legitimidad que le da una militancia que se ha impuesto a las tesis de las élites dirigentes, los barones y la vieja guardia, lo que, a su juicio, le confiere una margen de maniobra mucho mayor. El secretario general, pues, será "más rígido en la Ejecutiva, dados los antecedentes", afirman dichas fuentes.

"Habrá integración, claro, pero con cabeza", afirma un dirigente cercano a Sánchez, para quien Patxi López "tiene ahora la oportunidad de demostrar el compromiso de unidad que tanto ha pedido". La integración obviará perfiles "duros y complicados", así como a los secretarios generales territoriales, algo que Sánchez ya incluía en el proyecto político que llevó a las primarias. La razón es que considera que se corre el riesgo de confundir intereses regionales y nacionales y que para eso está el Consejo Territorial, donde están representados todos los líderes de los distintos territorios.

De momento, no se conoce mucho acerca de la Ejecutiva que está diseñando Sánchez. Se sabe que José Luis Ábalos suena para ser secretario de Organización y que Adriana Lastra podría ser portavoz en el Congreso, sin embargo, la decisión aún no está tomada y el buen hacer que Ábalos está demostrando como portavoz parlamentario provisional tras la dimisión de Antonio Hernando podría llevar a buscar una solución intermedia que pase por situar a Lastra como vicesecretaria general. Sí está confirmado, en cambio, que Sánchez ha ofrecido al alcalde de Valladolid, Óscar Puente, uno de sus más firmes defensores, el puesto de portavoz de la  portavocía de la Ejecutiva federal del PSOE.

Así lo ha confirmado este lunes el propio Puente, para quien es posible compatibilizar la alcaldía con dicha portavocía en caso de aceptar, algo que decidirá la semana antes del congreso. A su juicio, para atender a los medios de comunicación y atender las tareas de comunicación no es necesario estar en la capital de España más allá de asistir a las reuniones de la Ejecutiva federal.  En cualquier caso, ha admitido que necesitará "ayuda" para esta tarea, pero ha avanzado que podría tratarse de una "portavocía más coral", lo cual no cree que sea "una mala idea".

Además de Ábalos y Lastra, ambos piezas clave en la campaña, Sánchez contará a buen seguro con Manuel Escudero y José Félix Tezanos, los redactores de su proyecto político. Y también suenan con fuerza los nombres de aquellos que más le apoyaron en la carrera, como el diputado vasco Odón Elorza, la diputada balear Sofía Arranz, el navarro Santos Cerdán, la aragonesa Susana Sumelzo, el valenciano Andrés Perelló y los sevillanos Alfonso Gómez de Celis y Francisco Salazar. En cuanto al PSC,  podría contar con la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon.

Por su parte, en el PSOE andaluz aseguran que respetarán la dirección que elija el secretario general. Así lo han manifestado en público y también en privado, como hizo la propia Susana Díaz cuando habló por teléfono el viernes pasado con el secretario general, a quien además pidió "respeto" para los territorios y para los expresidentes socialistas, que estuvieron alienados con ella en las primarias.

A este respecto, Sánchez espera que los expresidentes y ex secretarios generales, como Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba, asistan al 39 Congreso Federal del 17 y 18 de junio, a pesar de que ninguno de ellos le apoyó en las primarias. Así lo ha señalado este lunes el portavoz parlamentario provisional, José Luis Ábalos, en una entrevista en RNE en la que les ha recordado que, tras la reelección de Sánchez, "éste sigue siendo el PSOE, la organización sigue siendo la misma". Ábalos ha dicho que espera que "asistan" y que "no condicione un secretario general u otro" para que estas figuras históricas del PSOE "estén presentes".

Asimismo, Ábalos, hombre de confianza de Sánchez, ha advertido a la presidenta andaluza de que el "respeto a los territorios" no puede significar "independencia, desconexión o desprenderse de la dirección" federal. "¿Qué se entiende por respeto a los territorios? ¿una capacidad tan autónoma que sea prácticamente independiente? ¿una desconexión? ¿desprenderse de la dirección?", se ha preguntado Ábalos en una entrevista en RNE.A su juicio, el respeto que demanda Susana Díaz a Pedro Sánchez se debe producir a las normas y competencias propias de cada territorio, pero "sin que ello lleve a pensar que son direcciones independientes". En este sentido ha recalcado que tiene que haber una "coordinación de la política" en todo el partido que "toca ejercer a la dirección federal".