En un comunicado, AECC de Bizkaia ha recordado que, a mediados de 2017, "ya se detectaba que urgía un relevo generacional en los donantes de sangre para asegurar las reservas, ya que el donante medio está envejeciendo y no se incorpora gente joven al mismo ritmo".

La edad promedio del vasco que cede su sangre de manera altruista se sitúa entre los 44 y los 45 años, y solo un 18% tiene menos de 25 años. A partir de los 60 años el porcentaje vuelve a bajar "drásticamente", porque hay mayor número de personas con patologías crónicas.

Asimismo, ha explicado que, durante períodos con condiciones climáticas adversas, el problema se agrava debido a las dificultades para realizar algunas extracciones de sangre.

"El frío, lluvia y viento de estos últimos días, provoca que los donantes habituales se retraigan y no acudan a donar de forma habitual, además de por el alto porcentaje de donantes en situación de cuarentena, por infecciones virales respiratorias", ha indicado.

Por ello, la AECC de Bizkaia ha hecho un llamamiento a los donantes habituales para que acudan a donar en estos días, y así "poder hacer frente a las necesidades urgentes de sangre que existen, también entre los pacientes de cáncer".

Asimismo, ha extendido el llamamiento "a todas las personas que todavía no son donantes por 'miedo a la aguja', por la trascendencia que esto tiene posteriormente para la vida de tantas personas en general y enfermas de cáncer en particular".